EEUU alberga bajo el subsuelo 43.800 millones de barriles de petróleo recuperables, un 12% más de lo que se creía
Las reservas probadas de petróleo en EEUU han subido un 12% en la última revisión realizada por la Agencia de la Energía de EEUU (EIA por sus siglas en inglés), cuyos datos pertenecen a diciembre de 2018. La revisión muestra que la mayor potencia económica del mundo alberga 43.800 millones de barriles de petróleo crudo, frente a los 39.200 millones de la estimación anterior. Este cambio se debe, sobre todo, a la extensión de los proyectos ya activos y por nuevos descubrimientos de pozos de petróleo.
Además, si se suman a esas reservas el ‘condensado de gas natural’ (un líquido que se obtiene y separa tras la extracción de gas natural) que tiene un uso muy similar al del petróleo crudo, las reservas probadas ascienden a 47.100 millones de barriles barriles. Aunque el dato por sí solo parece monstruoso, lo cierto es que valdría para cubrir únicamente un año y medio de consumo.
Los países con mayores reservas probadas del mundo siguen siendo Venezuela con 301.000 millones de barriles, Arabia Saudí con 266.000 millones, Canadá con 170.000 millones e Irán con 158.000 millones. No obstante, al país persa se le debe sumar el hallazgo reciente de un nuevo yacimiento que puede incrementar la cantidad en varios miles de millones de barriles. Esta revisión no se producirá hasta diciembre de este año.
¿Qué son reservas probadas?
Las reservas probadas se definen por la propia EIA como los volúmenes estimados de hidrocarburos que el análisis de datos geológicos y de ingeniería demuestra con certeza razonable que son recuperables bajo las condiciones económicas y operativas existentes.
Las estimaciones de reservas cambian de año en año a medida que se realizan nuevos descubrimientos, que los campos existentes se evalúan más a fondo, a medida que se extraen las reservas existentes, cambian los precios y los costes, y teniendo en cuenta la evolución de la tecnología.
La EIA también achaca el aumento a unos precios más elevados: «Un entorno de precios favorable en 2018, relativamente más altos en el petróleo y el gas natural, impulsó los niveles de reservas probadas de petróleo y gas natural en EEUU. Los precios más altos del crudo y el combustible a menudo pueden incrementar las estimaciones de reservas probadas, porque una porción más grande de ese petróleo puede ser recuperable y transformado con los costes actuales. En 2018, el precio spot anual promedio para el petróleo crudo West Texas Intermediate (WTI) subió desde los 51,03 dólares por barril en 2017 hasta los 65,66 dólares en 2018, un aumento del 29%».
En alza desde 2015
Desde 2015 (cuando se desplomó el precio del crudo), las reservas probadas de crudo en EEUU han mostrado una tendencia al alza con la ayuda inestimable del fracking o fracturación hidráulica. Esta técnica (muy intensiva en tecnología y maquinaria) permite extraer el shale oil o petróleo de esquisto de formaciones porosas, multiplicando las reservas de petróleo crudo en EEUU.
A pesar de esta revisión al alza, EEUU sigue siendo el décimo país por reservas probadas de petróleo, pero rozando los talones de Libia (noveno en discordia), que cuenta con una cantidad de crudo recuperable de 48.000 millones de barriles de petróleo.
Fuente: El Economista.