EDVSA y la historia de su deuda de $546 millones en Vaca Muerta
Electrificadora del Valle SA trabaja para las grandes productoras del shale. Su rol principal es el de llevar electricidad a los yacimientos. Las pymes ven un ardid financiero que dejó afectadas a 522 razones sociales. Irán a la Justicia
“Nos arruinaron la vida, esto es como ir a una pelea contra Mike Tyson en el Madison Square Garden, sabiendo que no tenemos ninguna chanche de ganar”.
La frase pertenece a Ignacio Iranzi, un empresario pyme de Neuquén (vende viandas saludables al sector hidrocarburífero), que es uno de los perjudicados, entre 522 razones sociales, que le reclaman el pago de una millonaria deuda a Electrificadora del Valle (EDVSA).
La situación comenzó a tomar forma hace algunos meses, cuando la empresa comunicó a sus empleados la reducción por seis meses del 85% de los salarios. Esto coincidió con una serie de cheques rechazados de los que dan cuenta las pymes neuquinas perjudicadas.
La deuda oficial de acuerdo al Banco Central de la República Argentina (BCRA) es de $546.176.214 con 1132 cheques rechazados. Sin embargo, fuentes del sector con acceso a base de datos bancaria consignaron a +e que la deuda hoy es de $772.076.671 con 522 empresas, con facturaciones diversas: desde $1.200 a $40.000.000.
Hoy un grupo de empresarios pyme anunció que va a realizar una protesta en las puertas de la empresa ubicada en el Parque industrial Neuquén debido a que algunas firmas están al borde de la quiebra. Tras que no pueden a pagar sueldos por la baja de la actividad (desplome del barril de Brent en febrero y el parate del coronavirus en marzo y abril), ahora se suma las deudas de EDVSA.
“Se viene una denuncia penal federal por estafa contra todo el directorio de EDVSA (presidido por Osvaldo Nunzi), esto está perfectamente armado para tirarlo en la pandemia porque saben que la gente no se moviliza y nadie va a hacer ningún lío. Nos somos una planilla de Excel, arruinaron la vida de mucha gente”, añadió Iranzi, en diálogo con +e.
Este medio intentó contactarse en diversas oportunidades con integrantes de la conducción de la compañía, pero hasta el momento no fue posible.
Iranzi detalló además que EDVSA generó un modelo de Acuerdo Preventivo Extrajudicial (APE) para, de alguna manera, no entrar en quiebra y quedar en una situación financiera más decorosa ante el BCRA y también con la AFIP. El acuerdo es con los acreedores por comprobantes anteriores al 18 de abril pasado y tiene sede social en Buenos Aires.
“Al no entrar en concurso ante quienes los contratan, ellos están impecables con los bancos y la AFIP, está todo muy armado, los únicos perjudicados son todos los que estamos dentro de ese acuerdo, hayamos firmado o no. Es una situación de indefensión terrible, nos sacaron de la provincia para litigar”, indicó el empresario pyme.
Indicó que EDVSA contrató un prestigioso buffet de abogados en Buenos Aires y que la pelea legal será muy difícil, a menos que haya una intervención fuerte desde los gobiernos, por la cantidad de empresas que, para su entender, cayeron en un ardid con modos de presunta estafa. “Es como pelear contra Myke Tyson en el Madison Square Graden”, graficó.
Las 522 empresas que quedaron “enganchadas” a las facturas impagas de EVDSA son de distintos rubros, desde metalúrgicas, servicios de cátering, alquiler de bombas, publicidad, y diversos servicios que llegan a más de $700.000.000.
Hace poco se filtró una planilla de Excel con las deudas a pagar por la empresa, que en un futuro se podría convertir en cheques rechazados del BCRA, sumados a los 1132 oficiales que suman $546.176.214.
Los proveedores con facturas a cobrar más grandes son Proyectos Metalúrgicos SA con $37.335.791, Stelki Sarita Senobia, cuyo monto a cobrar asciende a $35.565.267, Cimet SA con facturas por $29.584.638 y Servigruas SRL con $29.584.638, según los datos que se habrían filtrado internamente desde la compañía.
También le siguen Piedra Pampa SRL con $19.749.634 y Terar SA cuyo monto asciende a $19.376.889, Blanco Grup SA con $16.466.216, y Sullair Argentina SA, con facturas por $16.147.248 entre otras de las 522 razones sociales. Además, hay unas 60 empresas que tienen facturas pendientes de pago de entre $1.000.000 y $2.000.000.
El grado de cheques impagos y el daño colateral en la industria pymes aún no tiene precedentes en la historia reciente que hoy tiene que lidiar con un panorama oscuro, con baja de sueldos, retiros voluntarios y ausencia de actividad en Vaca Muerta.
Fuente: LMNeuquen.