La reserva de petróleo se creó en 1975 para servir como almacenamiento de emergencia. Hasta el 13 de agosto pasado, almacenó unos 621 millones de barriles en tanques subterráneos, según mostraron las cifras del Departamento de Energía.

La producción que se comercializará equivale a más del doble de lo que se subastó hace tres meses. Es para entregar durante el cuarto trimestre del año cuando la demanda estadounidense de combustibles se reduce por la temporada invernal y las refinerías bajan las compras de petróleo mientras realizan mantenimientos y reparaciones.

Sería por intermedio de una subasta y se trata de la mayor venta de crudo de sus tanques este año y se da en un contexto de incertidumbre sobre la demanda de combustibles, por el aumento de contagios de Covid-19.

La venta se ve reducida después de que los precios del crudo cayeran alrededor de un 15% luego de haber alcanzado un máximo de 6 años y medio a principios de julio. La baja en los precios se generó por la propagación de la variante Delta que amenaza con descarrilar la recuperación económica.

Compañías como BlackRock Inc. y Jefferies Financial Group Inc. avisaron que suspenderán por tiempo indefinido sus planes de volver a la presencialidad en las oficinas.