Santa Cruz: CGC sigue proyectando inversiones en la provincia
La compañía es parte del grupo Corporación América, un holding familiar de origen nacional que invierte en el país desde hace décadas en áreas como aeropuertos, infraestructura, tecnología y energía.
El pasado mes de noviembre, el Gobierno de Santa Cruz firmó el acuerdo para la prórroga de las concesiones de las áreas que opera CGC en Santa Cruz. Este acuerdo extiende por 10 años las áreas que estaban bajo titularidad accionaria de Sinopec y pasaron a manos de la empresa controlante CGC.
La Provincia recibirá por la producción computable proveniente de cada Concesión de Explotación una regalía total del 16% a partir del 2022. Adelantando el incremento de regalías y eliminando el “descuento por tratamiento” contra el 14,2 % del actual acuerdo.
Esta prórroga significará una inversión por parte de CGC de 1.150 millones de dólares y se estima para el 2022 contar con 9 equipos de Pulling, 2 Flush By, 2 work over y 1 perforador, generando aproximadamente 2.500 puestos de trabajo directos, indirectos e inducidos.
CGC es considerada como el sexto productor de gas más grande de Argentina y concentra la mayor parte de su operación en la Cuenca Austral, provincia de Santa Cruz, donde está presente desde hace 30 años, aunque tiene activos en las cuencas Neuquina y Noroeste.
Es una empresa que cuenta con 100 años de trayectoria y una de las líderes en la industria de energía en Argentina. Se dedica a la exploración, explotación, desarrollo y producción de hidrocarburos. Con una operación de 8 MM acres, sus actividades se concentran principalmente en la cuenca Austral continental y la cuenca del Golfo San Jorge, ambas localizadas en la provincia de Santa Cruz en el sur del país, así como también en la cuenca Cuyana, provincia de Mendoza.
Opera y/o tiene participación en más de 60 yacimientos de petróleo y gas, distribuidos en sus principales áreas de operación, así como también en la cuenca Neuquina y la cuenca del Noroeste.
La operadora posee además una significativa infraestructura que incluye plantas de tratamiento de petróleo y gas natural, sistemas de recolección y baterías en cada yacimiento y más de 5000 km de ductos de interconexión para transportar la producción actual y futura hasta su tratamiento.
Tiene importantes instalaciones de almacenamiento y entrega, con terminal y puerto propios (con una capacidad aproximada de crudo de 140.000 m3) cerca del puerto de Punta Loyola, lo que le permite acceder fácilmente a distintos mercados.