Desafío Pymes: asociarse con los grandes para crecer
A través del programa ProPymes, Grupo Techint impulsa a los clientes y proveedores que forman parte de su cadena de valor a desarrollar su potencial y proyectarse al mundo. DELTA3 e INPROCIL son dos pymes que se asociaron con grandes empresas para lograr productos de altísimo valor agregado.
El programa ProPymes nació en 2002 como una manera de dar respuesta a la crisis económica argentina en esa época y de transformar las dificultades en oportunidades. Hoy, 20 años más tarde, es uno de los programas de apoyo a cadenas de valor con más trayectoria en el mercado, a través del cual la gran empresa acompaña a sus clientes y proveedores en fortalecer su competitividad, proyectarse al mundo, potenciar sus inversiones en capacidades productivas, y detectar oportunidades de sustitución eficiente de importaciones.
“Se trata de un programa de transferencia de aprendizajes y asociatividad entre la gran empresa que es el Grupo Techint y su cadena de valor, compuesta por los clientes y proveedores de las distintas compañías que conforman nuestra organización”, explica Diego Schabes, gerente de relaciones institucionales de Tenaris, una de las empresas que forma parte del Grupo Techint, líder mundial en la producción de tubos y servicios para la industria energética mundial.
Lo que comenzó con poco menos de 30 pymes hoy alcanza a 938 pequeñas y medianas empresas, lleva más de 41.000 personas capacitadas y, en línea con su vocación exportadora, muchas de estas pymes llevan vendidos desde Argentina más de 239 millones de dólares sólo a empresas del Grupo Techint en el mundo, además de a otros clientes.
Dos ejemplos de éxito surgidos de esta fructífera asociación son, por un lado DELTA3, pyme de innovación tecnológica de Parque Patricios, Ciudad de Buenos Aires, y proveedora de Tenaris. Por otro lado, INPROCIL empresa de la localidad entrerriana de Gualeguay que produce cilindros de acero para gas vehicular, y clienta de Tenaris.
DELTA3: tecnología de vanguardia
Uno de los ejemplos de asociatividad más exitosos del programa es el de DELTA3, pyme argentina creada por dos emprendedores tecnológicos que ofrece soluciones de realidad virtual y aumentada a diversas industrias.
En el 2017 surgió la oportunidad de desarrollar simuladores de realidad virtual para entrenar a los futuros operadores de grúas de Tenaris. “Trabajamos en conjunto, Tenaris apostó en nosotros, tuvieron confianza en nuestra tecnología y en nuestra capacidad de desarrollar el proyecto. La compañía fue una pieza clave, porque con el apoyo del programa ProPymes, los simuladores se desarrollaron en conjunto con técnicos e ingenieros que Tenaris puso a disposición” destaca Martín González, CEO y Fundador de DELTA3. Los simuladores que desarrollan permiten ahorrar en tiempos y costos porque los operadores no necesitan la máquina real para aprender. “Se trata de un sistema virtual que permite eliminar riesgos, además de practicar situaciones que no sería posible en la vida real por ser altamente peligrosas”, agrega González. Tanto él como su socio Eduardo Magnetto se sienten parte de una generación que trae el futuro al mundo de la industria.
Por su parte, Schabes destaca que esta es la primera experiencia de Tenaris con este tipo de tecnologías en sus procesos de formación industrial, y la idea surgió a partir de una necesidad concreta que debía adaptarse a la empresa. “DELTA3 tomó el desafío y desarrolló un producto de primera clase; la calidad, la fiabilidad, versatilidad a la que pudieron arribar con nuestro apoyo hicieron que el resultado no tenga comparación con otros de su tipo a nivel global”, aclara. DELTA3 hoy provee simuladores de grúas a la planta de Tenaris en la localidad bonearense de Campana, y también a Estados Unidos, Canadá, México, Italia y Rumania, países donde la compañía tiene operaciones. Además, el apoyo recibido le permitió expandirse y proveer simuladores y experiencias de realidad virtual a otras empresas, tanto en el ámbito local como en el exterior.
Otro caso de trabajo conjunto con resultados de excelencia alcanzado a través de ProPymes fue el de INPROCIL, productor de cilindros para el almacenaje de gas vehicular radicada en Gualeguay, Entre Ríos.
Con el apoyo de ProPymes logró ampliar su capacidad productiva con la instalación de una nueva planta. “La oportunidad de Vaca Muerta como segunda reserva mundial de gas no convencional, y las políticas del mundo sobre el uso de la energía, generan un contexto en donde el gas se convierte en el combustible ideal para llevar adelante la transición energética. Con este panorama, apoyamos a INPROCIL en la ampliación de su capacidad productiva y la expansión de su negocio hacia el desarrollo de cilindros de gas para vehículos de transporte pesado de carga y de pasajeros”.
Además de las fuertes ventajas medioambientales que ofrece el gas como combustible en ese segmento, “es una oportunidad para sustituir importaciones de combustibles alternativos, como el diésel, contribuyendo en un ahorro de divisas por parte de nuestro país” agrega el gerente de relaciones institucionales de Tenaris. A partir de esta inversión, y luego de un trabajo en conjunto con otros actores relevantes como Scania, fabricante de vehículos de carga y pasajeros que está apostando fuertemente a la movilidad a gas, estos cilindros producidos en Gualeguay ya son exportados para ser instalados en vehículos para toda Latinoamérica.
“ProPymes, a través de Tenaris, nos acompañó desde el minuto cero cuando quisimos incursionar en el tema de expansión de tuberías, nos acompañó al exterior para buscar proveedores, en la puesta en marcha para homologar el producto final, nos puso técnicos especialistas, y nos mostró cómo implementar estas tecnologías. Gracias a este apoyo estamos a la altura de proveer a un fabricante global como es Scania”, señala Gonzalo Benvenuto, presidente de INPROCIL.
Sobre el proceso, Schabes asegura que ProPymes ayudó a llevar adelante el montaje de la nueva planta industrial y agrega que “Argentina tiene la oportunidad para convertirse en un referente global en la producción de gas, e INPROCIL se adelantó con el montaje de esta planta. El segmento de utilización del gas para vehículos de transporte pesado y de pasajeros tiene una oportunidad de crecimiento formidable en nuestro país, y hoy existe un proveedor que está involucrado fuertemente en esta iniciativa.”
El gas vehicular es un combustible de transición energética clave en el camino de descarbonización, y entre las ventajas que tiene frente otros combustibles fósiles se destacan que reduce en un 10% las emisiones directas de gases de efecto invernadero, en un 90% el material particulado comúnmente llamado hollín, y en un 50% las emisiones sonoras. En este sentido, Benvenuto se siente orgulloso de formar parte de la generación de industriales que participa activamente en proyectos de reconversión energética, ofreciendo soluciones para una movilidad más sustentable.
Fuente: La Nación