Producir energía con la mirada puesta en futuro
PCR es la empresa petrolera más antigua del país y se diversificó hasta abarcar el cemento y las energías renovables. Su trayectoria, su visión y su equipo de trabajo la hacen ser una de las compañías más confiables del mercado.
Producir energía con la mirada puesta en futuro
Producir en la Argentina es posible y la empresa PCR lo demuestra hace 101 años. Nació en 1921 en Comodoro Rivadavia como una petrolera y es la más antigua en la actividad. Y desde ese momento se diversificó hasta lograr un equipo de más de 800 personas que trabajan en distintas provincias de la Argentina y también en Ecuador.
La compañía se expandió a otras áreas y ahora también opera en el mercado del cemento y en el de las energías renovables. Con la mirada puesta en el futuro, PCR busca reinventarse constantemente para atender a las necesidades del presente.
Actualmente, la firma opera en 5 yacimientos de La Pampa y Mendoza y en 4 yacimientos de Ecuador. Recientemente se logró la extensión del plazo del yacimiento de Mendoza “El Sosneado” hasta 2035 lo cual reafirma el compromiso de crecimiento e inversión en el país. En Ecuador cuenta con operaciones en los yacimientos productivos Pindo y Palanda, en y dos bloques exploratorios (Sahino y Arazá Este).
En su proceso de crecimiento, la empresa se volcó hacia la industria del cemento. Hoy en día tiene dos plantas en operación y se fortalece como el principal fabricante de cemento de la región patagónica y el mayor exportador de cemento de la Argentina. La planta de Pico Truncado es una de las más modernas del país.
Energía renovables
El siguiente desafío fue el desembarco en el área de las energías renovables. Esto fue algo que parecía inevitable, dado que la empresa nació en Comodoro Rivadavia, un lugar con un recurso eólico de clase mundial. “Observar esto siempre nos hizo pensar que las energías renovables tenían un gran potencial en el país”, indicó Martín Brandi, CEO de PCR.
El impulso definitivo para volcarse al rubro se dio en el año 2015, cuando se promulgó la ley 27.191, que establecía una política de estado para las energías renovables en el país y contaba con apoyo de la totalidad de las fuerzas políticas. Así se impulsó la creación de la división Energías Renovables que se materializó con la inversión en el parque eólico del Bicentenario. Actualmente la empresa tiene 3 parques en operación por un total de 329,4 MW y otros 3 parques en construcción. Para el 2024 se espera que cuente con 527 MW operativos.
“Fue un gran desafío generar esta nueva división dentro de la compañía. Este desafío fue logrado con éxito por contar con un excelente equipo de trabajo, comprometido y con alto profesionalismo. Adicionalmente, el apoyo brindado por el directorio permitió unir enormes esfuerzos de diferentes áreas de la empresa, todas comprometidas con el objetivo común de construir nuestro primer parque eólico. Tenemos un profundo compromiso por seguir desarrollando proyectos de generación de energía renovable en el país y continuar siendo actores protagónicos de la transición energética”, aseguró Brandi.
Estas palabras se reflejan en los resultados. En 2021 PCR fue la segunda mayor productora de energía eólica del país, al lograr generar el 12% del total de toda esta energía. La idea es seguir llevando soluciones de suministro de energías renovables a precio competitivo a los clientes, que son principalmente industrias privadas que buscan reducir su huella de carbono. En este objetivo la empresa tiene varias cualidades que la distinguen, como la rapidez de acción, el conocimiento de la industria, la integración con las comunidades en las que opera y la eficiencia.
Trabajar bajo estándares ambientales
PCR también está en el proceso de descarbonizar sus operaciones y los resultados ya están a la vista. El año pasado registró un 50% del consumo eléctrico de sus plantas de cemento a partir de fuentes renovables y el plan es llegar al 90% para el 2025. Además, la firma alcanzó la certificación en sistema de gestión ambiental en todos los parques operativos bajo la Norma ISO 14001. Esto significa que trabaja bajo estándares ambientales internaciones protegiendo el medioambiente, identificando riesgos y promoviendo la mejora continua como cultura de trabajo.
Pasar de operar en una industria consolidada, como la petrolera, a otra en crecimiento como la de las energías renovables implicó un cambio. PCR fue una de las pioneras en energía eólica. Sin embargo, el CEO encuentra puntos en común entre ambos rubros: “En ambas industrias vemos que la infraestructura está limitando su potencial, por ejemplo en los gasoductos para evacuar el gas de Vaca Muerta y la capacidad de transporte eléctrico. Argentina tiene excelentes recursos energéticos pero necesita más infraestructura para mostrar su verdadero potencial”, indicó.
Estas cuestiones son las que la empresa tiene en cuenta para el futuro. Las energías renovables representan el cambio y por eso consideran que se debe trabajar fuertemente para explotar todo su potencial. “El futuro es promisorio tanto en la Argentina como en el mundo. Las renovables han demostrado ser competitivas en costo y por otra parte son parte fundamental para lograr reducir la huella de carbono. En la Argentina puede seguir aumentando la penetración de renovables en la matriz aunque es necesaria nueva infraestructura. En particular la capacidad de transmisión eléctrica en alta tensión representa un cuello de botella para el sector. En el mediano plazo la electrificación de la economía, el almacenamiento (baterías) y el hidrógeno verde traerán oportunidades para que las renovables sigan creciendo”, explicó Brandi.
Una muestra de la confianza que PCR genera en el mercado es la emisión que hizo en junio, en la que logró emitir deuda por 6.000 millones de pesos a BADLAR +0% a 12 y 18 meses. Esto se explica por varias cuestiones que hacen al corazón de la compañía. Por un lado, su trayectoria y reputación. Por otro, un equipo de trabajo que tiene puesta la camiseta y es experimentado, comprometido y profesional. Y por último, según describió Brandi, la visión de largo plazo y el compromiso con la empresa de los accionistas y directores.
“Lo que nos distingue como desarrolladores y operadores de proyectos es la rapidez de acción, el conocimiento de la industria, la integración con las comunidades donde operamos y la eficiencia de nuestras operaciones. Un factor que resalta es que los compromisos que asumimos los llevamos adelante y los proyectos los finalizamos en tiempo y forma. Además, nuestros negocios permiten una buena diversificación del riesgo y otorgan cierta estabilidad ante tiempos difíciles, pero al mismo tiempo estamos bien posicionados para capturar oportunidades”, sintetizó Brandi.
Fuente: Clarín