Los petroleros levantaron la medida de fuerza que paralizó a Vaca Muerta durante una reunión en el trabajo y actualmente trabajan en una estrategia de evacuación médica
El Sindicato de Petróleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa desde el domingo un paro total de actividades en la cuenca neuquina, en repudio de los «accidentes trágicos» que sufren los trabajadores y en reclamo de respuestas por parte de las empresas y del gobierno nacional. Siempre que facilito una reunión entre las partes interfiere el Ministerio del Trabajo.
Decidimos poner en marcha un plan de lucha que se decidió el miércoles pasado porque estábamos “cansados de los trágicos accidentes que cuestan vidas o dejan trabajadores heridos” y porque las empresas y el gobierno nacional no habían respondido a la situación.
El gremio exige «medidas urgentes y reales» y la presencia del supervisor de riesgos laborales del área y del Ministerio del Trabajo de la Nación. Dado que las ART están gobernadas por la SRT y el Ministerio del Trabajo, actualmente no existe una estrategia para la prevención de accidentes o capacitación de las ART, según el gremio que dirige Marcelo Rucci.
El sindicato convocó a una reunión con todas las partes del ministerio en respuesta a esta denuncia y con un descanso indeterminado sobre la mesa. La reunión finalizó a las 15.30 horas con el compromiso del sindicato de tomar medidas contundentes y que todos siguieran trabajando en un procedimiento de evacuación médica.
Afirmaron: «Los empleados son un legado financiero que solo sirve para romper récords de producción mientras nosotros rompimos récords de muerte».
El gremio calificó de «alarmante» la poca consideración que los empresarios tienen por la vida y la integridad de las personas, y consideró «inadmisible» que «poderosos decisores tengan un talante miserable que cueste o destruya la vida de los trabajadores».
“Es intolerable y desgarrador ver cómo, a pesar de las denuncias que hacemos ante las autoridades competentes, las cosas siguen paralizadas. Hace años que venimos pidiendo lo mismo mientras los empresarios juegan la mano oculta y otros líderes se dedican a la política barrial”, continuó.
Finalmente, el colectivo aseguró que en pleno siglo XXI, “trabajar es un derecho, e irse con vida a casa también lo es”, y advirtió que “si los responsables no toman ninguna medida al respecto, la tomaremos unilateralmente”.