El candidato a las PASO que recibió más votos anticipó a lo largo de su campaña las asperezas de sus planes para el sector energético, donde el foco está en la formación neuquina.

¿Qué les deparará a los intérpretes de Vaca Muerta si Javier Milei es elegido presidente? Es incierto porque Milei es incierto; no hay nada que Milei haya hecho para respaldar lo que ha dicho como candidato, y el candidato más popular de las elecciones de las PASO nunca ha ocupado un cargo público.

Inicialmente, Milei es un defensor del libre mercado sin la participación del gobierno, pero es consciente de que esto no se puede hacer de la noche a la mañana. Menos en una industria como la energética, donde el Estado es el principal actor en Argentina, al punto que incluso el famoso gasoducto de Vaca Muerta se construyó porque el gobierno nacional afectó fondos públicos para el financiamiento de todo el proyecto.

Milei prometió que si se hiciera cargo del gobierno del país y tomara el control de la política energética, es decir, la política de hidrocarburos, eliminaría las barreras de entrada para los impuestos a la exportación y los impuestos a la exportación, que son los derechos de exportación y las barreras a la importación.

Además, el candidato presidencial que recibió más votos en su campaña propuso permitir contratos de exportación de crudo y combustibles a mediano plazo.

Milei y sus propuestas

Milei advirtió que volaría la letra del marco legal bajo el cual se desarrolla la extracción de hidrocarburos. Se atacarán los puntos que, a su juicio, limiten la inversión privada y, en consecuencia, la producción.

Sin YPF, que ha servido de conducto para la mayor canalización de inversiones hacia Vaca Muerta y para mantener elevados los precios de los combustibles en el mercado interno en relación con los del mercado internacional, el modelo hidrocarburero operativo es imposible de entender. En opinión de Milei, la empresa petrolera estatal debería ser privatizada, pero en el momento adecuado y no inmediatamente si quiere ganar la presidencia.

Según la campaña de Milei, el precio de mercado de la empresa que está bajo control estatal está por debajo de lo que podría ser, por lo que Milei adelantaría primero un plan que elevaría el precio de las acciones de la empresa antes de ponerlas a la venta.

El plan de revalorización de la empresa no contempla mantener su función de regulador de precios del surtidor, al que pretende liberar para aumentar los precios hasta que sean competitivos con el llamado precio de paridad de exportación, que no es diferente del precio que quienes exportan fuentes de energía reciben.

Si bien el líder libertario aboga por cambios significativos en la economía, durante su campaña se comprometió a mantener los acuerdos alcanzados con el llamado Plan Gas Ar. No obstante, se avanzará en la supresión de las ayudas a la actividad productiva con traslado a los consumidores del coste resultante de la medida.