Crisis en Bolivia: empresarios pidieron a Luis Arce cambios normativos para revertir la “situación crítica” del gas natural
La Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía alertó sobre la “ausencia de nuevos proyectos” para favorecer las inversiones en exploración y explotación.
La CBHE advirtió que la ausencia de nuevos proyectos no permite vislumbrar descubrimientos y desarrollos a mediano plazo y la producción de gas está por debajo de 40 millones de metros cúbicos día.
Al celebrarse 100 años de actividad petrolera en el país, el sector enfrenta una situación crítica por la caída de la producción de gas y la Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía (CBHE) pide cambios normativos para atraer inversión a gran escala, que permita una reactivación de la actividad y abastecer al mercado interno y exportar hidrocarburos.
El martes 25 de junio, se conmemoraron los 100 años del inicio de la producción de hidrocarburos en Bolivia. Una fecha propicia para ratificar el compromiso del sector privado con el desarrollo hidrocarburífero del país, pero también para expresar la necesidad de generar condiciones adecuadas para la inversión en exploración y producción.
La CBHE expresó su “preocupación” por la progresiva caída de la producción de gas y afirmó que hay una “situación crítica”, pese a que las empresas y la estatal Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) desarrollan proyectos para mitigar esa declinación.
“Aún si los resultados son positivos, no son suficientes para aumentar sustancialmente la oferta de gas natural, que está por debajo de los 40 millones de metros cúbicos diarios (mm3d)”, dijo la entidad.
Bolivia pasó de producir en 2014 unos 22.187 millones de metros cúbicos de gas natural (mmm3) a 13.390 mm3 en 2023, mientras que las regalías por la exportación descendieron de más de 6.000 millones de dólares en 2014 a 2.043 millones de dólares el año pasado, según datos oficiales.
La CBHE mencionó que la reducción de la renta petrolera se debe a “varios factores” como la caída de la producción, la “participación proporcional de los volúmenes destinados al mercado interno” que en costo difiere con los precios de exportación. “A medida que más cae la producción, es menor el precio que se paga por ella y, por lo tanto, son mayores los esfuerzos que se requieren para hacer atractivas las nuevas inversiones”, apuntó la institución.
La entidad que aglutina a las empresas que participan en la producción de hidrocarburos pidió que el país brinde “condiciones para la inversión en exploración y producción, a través de cambios normativos, que posibiliten un equilibrio entre la factibilidad técnica y el riesgo económico”.
La última certificación de reservas hidrocarburíferas bolivianas, que data de diciembre de 2018, indicó que el país tiene 10,7 trillones de pies cúbicos (TCF) de gas natural, mientras que un reporte del Ministerio de Hidrocarburos en 2019 estableció que descendieron a 8,7 TCF.
El Gobierno de Arce aplica desde hace algunos años el ‘Plan de Reactivación del Upstream (exploración y producción)’ que incluye 42 proyectos exploratorios en diversas regiones para incrementar la producción de hidrocarburos y que podría arrojar resultados positivos más adelante.
Algunos expertos alertaron que la falta de combustibles y el encarecimiento de algunos alimentos se debe a la falta de dólares, originada por el descenso de los ingresos por la exportación de gas natural.
Recientemente el presidente de Bolivia, Luis Arce, fue criticado por decir que el gas natural, que durante varios años fue el sustento económico del país, “se ha agotado” y culpó a las administraciones anteriores por no realizar nuevas exploraciones.