Gas: Empezó a funcionar la Planta Compresora Mercedes que permitirá un ahorro de USD 6 millones diarios con gas de Vaca Muerta
La nueva infraestructura eleva la capacidad del gasoducto Mercedes-Cardales y reduce costos en la importación de combustibles líquidos y Gas Natural Licuado. La inversión apunta a potenciar la producción nacional y disminuir la dependencia energética externa.
La Planta Compresora Mercedes comenzó a operar con el objetivo de aumentar la capacidad de transporte del Gasoducto Mercedes-Cardales en 6 millones de metros cúbicos diarios (MMm3/d), llevando el volumen total a 15 MMm3/d. Esta obra, parte de un plan más amplio para aprovechar los recursos de Vaca Muerta, tiene como meta principal la sustitución de importaciones de combustibles líquidos y Gas Natural Licuado (GNL), generando un ahorro proyectado de USD 6 millones diarios.
El proyecto, anunciado oficialmente por el Gobierno nacional, estuvo rodeado de demoras y problemas contractuales. Según el comunicado de la empresa estatal Energía Argentina (Enarsa), la obra presentaba un avance del 60% cuando el nuevo gobierno asumió en diciembre de 2023. Pese a su estado incompleto, el Ejecutivo decidió continuar con su construcción por considerarla “fundamental para concluir el Gasoducto Mercedes-Cardales”, obra inaugurada durante la gestión anterior.
La Planta Compresora Mercedes forma parte de las obras complementarias del Gasoducto Perito Moreno, conocido anteriormente como Gasoducto Néstor Kirchner. Este sistema troncal conecta Tratayén, en la Cuenca Neuquina, con Salliqueló, en el oeste bonaerense, permitiendo evacuar la producción de gas no convencional de Vaca Muerta hacia los grandes centros urbanos y polos industriales del país.
La infraestructura, diseñada para reforzar la conexión entre los sistemas de transporte de alta presión operados por TGS y TGN, brindará mayor flexibilidad operativa en la región del Gran Buenos Aires y reducirá la necesidad de importaciones de gas natural. La empresa detalló que, durante el verano, esta ampliación permitirá reemplazar combustibles líquidos utilizados para la generación termoeléctrica en Santa Fe y el norte de Buenos Aires, mientras que en invierno reducirá significativamente las compras de GNL.
Además de los beneficios energéticos y económicos inmediatos, esta obra responde a una estrategia de largo plazo que busca impulsar la autosuficiencia energética nacional. De acuerdo con Enarsa, la ampliación del Gasoducto Mercedes-Cardales se enmarca dentro de un “master plan” de infraestructura energética que incluye otras iniciativas como la reversión del Gasoducto Norte, previsto para operar con gas de Vaca Muerta en mayo de 2024. Este proyecto permitirá abastecer siete provincias del norte argentino que actualmente dependen de importaciones desde Bolivia, a costos más altos y con una oferta en declive.
Pese a la importancia de la obra, las autoridades destacaron los desafíos enfrentados para su finalización. Entre los problemas más importantes figuraron reclamos de contratistas no resueltos, retrasos en la aprobación de SIRAS que complicaron la importación de materiales clave, una deuda de USD 2 millones, y una actualización de precios pendiente desde enero de 2023 por USD 4,5 millones. Estos inconvenientes, sumados a un contexto de ajuste del gasto público, llevaron al actual Gobierno a anunciar que este tipo de infraestructuras ya no serán desarrolladas por el Estado nacional. A partir de ahora, se espera que el sector privado sea el responsable de ejecutar proyectos de este tipo.
La Planta Compresora Mercedes eleva
El Gasoducto Mercedes-Cardales es un ducto de alta presión de 30 pulgadas de diámetro y 80 kilómetros de extensión, diseñado para transferir gas desde el sistema troncal del sur al sistema del norte. La ampliación de capacidad realizada mediante la instalación de la Planta Compresora Mercedes permite incrementar los volúmenes de transporte de 6 MMm3/d a 15 MMm3/d, garantizando mayor confiabilidad en el suministro para los grandes centros urbanos. Además, fortalece la capacidad de exportación hacia mercados regionales como Chile y Brasil, una vez cubierta la demanda local.
La puesta en funcionamiento de esta planta se suma a otro proyecto de relevancia anunciado recientemente: la ampliación del Gasoducto Perito Moreno. Declarada de interés público nacional, esta iniciativa de origen privado requerirá una inversión de USD 500 millones y permitirá aumentar la capacidad de transporte de gas en 14 MMm3/d, sumando un total de 35 MMm3/d a lo largo de toda la traza. Este desarrollo representa una inversión estratégica para seguir aprovechando los recursos de Vaca Muerta y generar un ahorro adicional de USD 567 millones al año en sustitución de importaciones.
La conexión entre los sistemas troncales operados por TGS y TGN también facilita la transferencia de gas hacia regiones más alejadas del país, como el norte argentino, donde los planes para ampliar la capacidad del Gasoducto Norte ya están en marcha. En conjunto, estas obras forman parte de un esquema que busca integrar de manera más eficiente la producción de Vaca Muerta con el consumo interno y las oportunidades de exportación.
La decisión del Gobierno de priorizar la conclusión de la Planta Compresora Mercedes, pese a las restricciones presupuestarias, responde a la necesidad de reducir la dependencia de combustibles importados y disminuir la presión sobre la balanza comercial energética. Según datos oficiales, la producción de gas no convencional de Vaca Muerta ya permitió un ahorro de USD 421 millones en importaciones de energía desde su puesta en marcha en julio de 2023 hasta septiembre del mismo año. Con el inicio de operaciones del gasoducto Mercedes-Cardales y su planta compresora, se espera que este ahorro aumente significativamente.
En términos de impacto operativo, la ampliación permitirá cubrir picos de demanda durante el invierno, cuando el consumo de gas suele dispararse, y reducir los costos de generación eléctrica en las principales centrales térmicas del país. Además, fortalece el suministro en zonas productivas y de consumo del centro del país, un factor clave para sostener el crecimiento económico y la competitividad industrial.
La obra también responde a un contexto global en el que los precios de la energía y los desafíos logísticos han puesto en valor la necesidad de aprovechar al máximo los recursos internos. La infraestructura construida en torno a Vaca Muerta consolida a la Argentina como un actor clave en el mapa energético regional, con capacidad para cubrir la demanda local y expandir su presencia en los mercados internacionales.
Para seguir leyendo haga click aquí
Fuente: Infobae