Las empresas se quedaron con más del 90% de las trasferencias que realizó el gobierno para cubrir gastos corrientes en 2022. Las subvenciones fueron las más altas desde 2016.

Los subsidios a la energía durante el 2022 fueron los más altos de los últimos 6 años y los datos muestran que las transferencias a la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico (Cammesa) y a Energía Argentina (Enarsa, exIeasa) fueron superiores a los 11.000 millones de dólares. Los fondos se utilizaron para cubrir los costos de generación eléctrica y para la compra de gas.

En total durante el 2022 el Estado destinó la abultada cifra de 12.335 millones de dólares, lo que equivale a nada más y nada menos que a un salto del 12% respecto a las transferencias de 2021, que fueron de 11.003 millones de dólares.

Los números oficiales se desprenden de la Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) y Presupuesto Abierto. Fueron recopilados por la consultora especializada del sector Economía y Energía (E&E), que conduce Nicolás Arceo.

Para encontrar subsidios más altos hay que remontarse a 2016, ese año se gastaron 14.235 millones de dólares. Sin embargo, el récord fue en 2014, cuando se destinaron 15.753 millones de dólares.

En números
11.363
millones de dólares le transfirió el Estado a Cammesa (72%) y a Enarsa (20%) durante el 2022 en concepto de subsidios.
Del total de 12.335 millones de dólares que se usaron el año pasado, unos 11.363 millones de dólares fueron transferidos a Cammesa y Enarsa. La cifra equivale a un 92% del total y deja en claro dónde tiene que ajustar el gobierno si busca reducir los gastos, en línea con los agudos compromisos de deuda que tiene el país.

Desde la E&E explicaron que el aumento de los subsidios devengados durante 2022 se debe casi exclusivamente a las mayores erogaciones que el Tesoro Nacional debió realizar a Cammesa a lo largo del año (+US$ 1.532 millones), incrementando su participación en los subsidios totales en 5 puntos porcentuales.

En números
1.532
millones de dólares adicionales le asignó el gobierno a Cammesa en 2022, respecto a 2021.
“Este crecimiento obedeció a un mayor costo de generación con relación a 2021 y, a su vez, que el grado de cobertura del precio estacional sobre el costo de generación se mantuvo en niveles similares a los del año previo”, precisaron.

Por su parte, durante el 2022 se redujeron los subsidios devengados a la producción de gas natural en aproximadamente unos 641 millones de dólares. Esto está directamente relacionado con el fin de la Resolución 46 (Plan Gas viejo) en 2021.

Mientras que las transferencias a Enarsa se incrementaron un 19% respecto a lo visto en 2021. Aquí los precios internacionales tuvieron mucho que ver, ya que las importantes crecieron más en costos que en volúmenes.

Los subsidios por sector
Acorde a los datos oficiales, las transferencias a Cammesa en 2022 fueron de 8.847 millones de dólares lo que significan un salto de casi el 21%, respecto a lo que se vio en 2021 (+US $1.532 millones). En términos de participación, significa que Cammesa se quedó con el 72% de los subsidios.

Las transferencias a Enarsa fueron de 2.516 millones de dólares, un 19% más alto (392 millones de dólares) de lo que se gastó en 2021. En términos de participación, lo que se gastó este año, principalmente para la compra de gas natural licuado (GNL), representó un 20% del total de subsidios.

En números
641
millones de dólares menos que en 2021, fueron los gastos del año pasado para cubrir los programas estímulo a la producción de gas.
En lo que hace al programa estímulo de producción de gas, los números oficiales dan cuenta de que en 2022 las trasferencias cayeron un 64% (641 millones de dólares) respecto al año anterior y se usó un total de 359 millones de dólares.

Fuente: Rio Negro