CECHA: “El 80% de las estaciones de servicio tuvo que endeudarse durante 2020 para seguir funcionando”
La Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines (CECHA) realizó un nuevo encuentro presencial de su comisión directiva luego de un año y medio de pandemia. Los dirigentes de las cámaras y federaciones hablaron de la preocupación ante los primeros indicios de desabastecimiento en estaciones de servicio de bandera blanca principalmente por el congelamiento de precios que rige para los combustibles.
Gabriel Bornoroni, presidente de CECHA dijo: “Hay un atraso del 10% y el 12% en los precios, en un contexto donde todos los costos para el estacionero van en aumento. A raíz de este escenario, donde las petroleras no actualizan los valores, ocurre que luego dejan de enviar productos al mercado, principalmente en las de línea blanca, lo que produce esta situación de desabastecimiento”.
“El 80% de las estaciones de servicio tuvo que endeudarse durante 2020 para seguir funcionando y sobrevivir. Ahora, en un contexto no ideal pero más promisorio, es importante poner en orden las cosas”, se explayó Bornoroni.
Además los dirigentes volvieron a insistir sobre la importancia de ser parte de la discusión del proyecto de ley sobre movilidad sustentable que busca poner fin a la comercialización de vehículos con motor de combustión interna en el país, para 2041. Igualmente desde la organización no creen que ese plazo sea plausible ya que el 75% de la matriz energética se basa en hidrocarburos.
“Me parece que es un proyecto inalcanzable en 20 años. El 75% de nuestra matriz energética se basa en hidrocarburos. Entonces andaríamos en vehículos eléctricos, pero que se cargan con electricidad producida con combustible fósil. Es un sinsentido”, deslizó el titular de los estacioneros, hace algunos días.
También cuestionó el cambio de marcha en materia energética luego del fuerte impulso anunciado hace unas semanas al Plan Gas para la utilización del GNC como combustible alternativo. “Ahora se le pone fecha de vencimiento a esa línea también. Son idas y vueltas que generan incertidumbre en el sector”, sostuvo Bornoroni.
Para el mandamás de los estacioneros, para lograr un cambio que sea realmente «verde», el país debería mutar a una matriz energética donde el 80% de la producción de energía venga de fuentes limpias, como la eólica o hidráulica, un proyecto “demasiado ambicioso para cumplir en veinte años”.
“Este es un contratiempo que también enfrentan otros países, que vieron que los autos eléctricos no garantizan un ambiente más limpio y debieron moderar sus pronósticos”, cerró Bornoroni.