CGC busca refinanciar su deuda
La petrolera de Corporación América está terminando de preparar su propuesta
La decisión de YPF y Telecom de lanzar el canje de sus bonos internacionales sin esperar a conocer el resultado del proceso de restructuración de la deuda soberana que está llevando a cabo el gobierno nacional ha incentivado a otras empresas a seguir sus pasos, más aún luego de que ambas han salido airosas.
Los directivos de Compañía General de Combustibles (CGC) han percibido una oportunidad en esta ventana que se ha abierto en el mercado, por lo que ya tienen todo listo para lanzar la refinanciación de sus obligaciones negociables (ON) de 300 millones de dólares con tasa del 9,50% y vencimiento el 7 de noviembre de 2021, afirma una fuente cercana a la empresa y el portfolio manager de un fondo de inversión local que tiene en su cartera deuda de la empresa.
Se trata de la segunda empresa que en los últimos días muestra interés en llevar adelante un proceso de este tipo. Como adelantó Desarrollo Energético, Albanesi ya empezó a conversar con sus acreedores para postergar los cerca de 200 millones de dólares que deberá pagar el año que viene entre capital e intereses correspondientes a sus créditos bancarios y bonos locales e internacionales.
“El equipo de Finanzas de CGC está monitoreando el resultado de los procesos que realizaron YPF y Telecom y, en base a eso, decidirá cuándo llevará a cabo la operación. Estamos listos para salir cuando estén dadas las condiciones”, resalta la fuente.
La petrolera de Corporación América está manteniendo muy proactiva para poder armar la operación y anunciar pronto la propuesta oficialmente en el mercado, explica el portfolio manager. “Están en el momento ideal para hacer una transacción amigable como la que realizó Aeropuertos Argentina 2000. Igualmente, los inversores saber que está todo tan mal en el país que no van a poder cobrar nada en 2021 si no llegan a un acuerdo”, destaca.
Según una analista corporativa que sigue de cerca los movimientos de la compañía, “este es un buen momento para lanzar la propuesta ya que la empresa tiene mucha liquidez tras haber cobrado 40 millones de dólares de la deuda que tenía el gobierno por la Resolución 46 y sería mejor aún si pudieran calzarlo con el anuncio de nuevo Plan Gas, en el que está trabajando la administración de Alberto Fernández”.
Desde CGC, buscan ser cautos antes lanzarse al mercado para evitar repetir la experiencia que pasaron el 1 de agosto de 2019 cuando tuvieron que suspender la emisión de un bono de 400 millones de dólares a entre 5 y 7 años en los Estados Unidos con la que pensaban cancelar el título de 300 millones de dólares que finaliza en noviembre de 2021.
En ese momento, sus directivos no quisieron convalidar tasas por encima del 10% que le pedían los inversores y se volvieron a la Argentina con las manos vacías, tras haber realizado una ronda de presentaciones en Londres, Boston y Nueva York. En esa oportunidad, la transacción RegS 144A estuvo manejada por Citigroup y Santander Bank.
Su título con tasa del 9,50% y vencimiento en noviembre de 2021, se negocia actualmente en el mercado a un precio de 80,50; lo que implica un rendimiento cercano al 11,80%, según el cierre del 27 de julio.
La compañía planea lanzar una oferta con características similares a las de YPF y Telecom, que incluiría una postergación del vencimiento, el pago de un “endulzante” en efectivo y/o una mejora en la tasa de interés, detalla el portfolio manager, aunque espera que el desembolso adelantado sea cercano al 10%, no tan grande como en los otros dos casos.
“CGC tiene una buena liquidez en este momento porque acaba de cobrar la deuda que el gobierno mantenía con la compañía por los meses de octubre, noviembre, diciembre, enero y febrero de la Resolución 46, y aún lo queda por cobrar marzo y abril, por lo que puede usar ese dinero para ofrecer un endulzante”, destaca la analista.
La petrolera controlada por el Estado ofreció pagar 125 dólares en efectivo y 925 en bonos amortizables semestralmente con tasa del 8,50% y vencimiento en 2025 por cada 1.000 de sus títulos Clase XLVII con tasa del 8,50% y vencimiento en marzo de 2021.
En tanto, Telecom propuso abonar un 32% del capital en efectivo y canjear el 70% restante de su actual ON Clase A con tasa del 6,50% y vencimiento en junio de 2021 por una nueva con tasa del 8,50% y vencimiento en 2025.
CGC espera tener un mejor nivel de aceptación del canje por parte de sus acreedores que el que consiguieron YPF (58,40%) y Telecom (63,35%), ya que sus títulos están en manos de pocos tenedores minoritas y ya han logrado identificar a casi la totalidad de los bonistas, semana el portfolio manager.
Una cuestión financiera
Además del bono de 300 millones de dólares, la compañía deberá afrontar una serie de vencimientos por cerca de 100 millones entre créditos bancarios y obligaciones negociables locales en pesos y moneda estadounidense durante buena parte de 2021.
El 5 de marzo tendrá que pagar 314, 60 millones de pesos correspondientes a su ON Clase 14 con tasa Badlar + 5%; tres meses después (el 5 de junio) le tocará el turno a la ON Clase 12 de 15,30 millones de dólares con tasa del 9% y a la ON Clase 13 de 895,30 millones de pesos con tasa del 8,50% y, finalmente el 21 de agosto deberá cubrir los 19,90 millones de dólares de la ON Clase 15 con tasa del 5%.
A estos vencimientos se le sumarán los 13,63 millones de dólares que tendrá que cancelar las últimas tres cuotas (enero, abril y julio) de la amortización de su ON Clase 10 y otras dos (febrero y mayo) por un total de 30 millones del crédito sindicado con el Banco Galicia, el Industrial and Commercial Bank of China (Argentina), Santander y Citibank.
CGC podría alcanzar niveles de EBITDA cercanos a 250 millones de dólares durante este año, con márgenes cercanos al 50%, considerando las actuales perspectivas de precios (3 dólares por millón de BTU promedio anual sin considerar subsidios y un petróleo a 45 dólares por barril) y volúmenes de producción de gas a 36.500 barriles de petróleo equivalente por día, estima la directora asociada de la calificadora de riesgo FixScr, Gabriela Curutchet.
“En 2020, se prevé una menor generación de caja operativa como consecuencia de la baja en el consumo y la demora en los pagos de los subsidios. Sin embargo, el flujo de fondos libre continuará positivo principalmente a través del manejo de las inversiones”, destaca.
Por eso, sus directivos saben que es de vital importancia para la compañía retornar a los niveles de actividad del año pasado tanto para fortalecer sus finanzas como para evitar el declive de las reservas de la compañía en cinco años y alcanzar una producción de entre 5 y 5,50 millones de MCD de gas natural.
Como adelantó Desarrollo Energético, la petrolera de Corporación América reanudó la perforación de pozos de tight gas en la Cuenca Austral, en la provincia de Santa Cruz, el 20 de junio, con la realización de uno vertical en el área Campo Indio Este, tras tres meses de parate, luego de que el gobierno pagara la primera parte de la deuda que acarreaba desde octubre.
De vuelta al trabajo
El nuevo plan de la compañía incluye llevar a cabo un total de 15 nuevos pozos (14 de desarrollo y 1 exploratorio), de los cuales 4 o 5 horizontales de 1.200 metros de largo cada uno y 10-11 verticales de 1.500 metros de profundidad hasta fines de diciembre, con los que podrían llegar a cumplir con sus metas para la Resolución 46, ya que venían adelantados en los trabajos con las tareas que habían realizado el año pasado, explican dos fuentes cercanas la empresa.
El exploratorio lo realizará en el yacimiento La Vanguardia en una parte del área Tapi Aiké, explica la primera de las fuentes y agrega que, además, esperan perforar otro de similares características en el mismo bloque a comienzos del año próximo en la parte que compartía con la británica Echo Energy, que decidió abandonar el proyecto por falta de fondos, agrega.
CGC produjo el año pasado un 14% más de lo que le establecía la normativa en 2019, que le fijaba un techo de 2,90 millones de metros cúbicos por día (MCD) de gas natural. La petrolera generó un promedio de 3,30 millones de MCD, y pudo facturar en promedio 2,79 millones de MCD (diciembre lo cerró con 3,80 MCD y el tope era de 2,90 MCD, un 31% más).
Esta es la segunda vez que la compañía tiene que recalcular su plan para 2020 y que decide retomar las actividades. Como adelantó Desarrollo Energético, la empresa había reiniciado la perforación el 2 de marzo con un equipo luego de un parate de dos meses por la falta de certezas sobre cuál sería el marco regulatorio que pensaba implementar el gobierno nacional para el sector.
Su programa de inversión original para 2020 incluía el desembolso de cerca 190 millones dólares para perforar 50 pozos (7-8 horizontales y 42-43 verticales) con dos equipos en la Cuenca Austral. Sin embargo, en noviembre, lo redujo a 27, debido a la incertidumbre que reinaba en el sector por el cambio de presidente.
Esta situación se intensificó a comienzos de este año y llevó a la empresa a paralizar totalmente las actividades en la Cuenca Austral, primero, por el incumplimiento en los pagos de la deuda atrasada y, luego, por la cuarentena, lo que la llevaron a quedar atrasada en cerca de 20 pozos para llegar al objetivo fijado para cobrar el incentivo a la producción de gas no convencional.
“Esta meta la podemos alcanzar si perforamos 8 horizontales en lo que queda del año ya que uno de ellos equivale a 4 de los verticales”, detalla la primera fuente y agrega que para esto tienen pensado subir un segundo equipo a partir de septiembre, lo que les daría tiempo de realizar todos los trabajos necesarios hasta diciembre.
Sin embargo, la compañía deberá sortear algunos obstáculos externos para cumplir con estos objetivos: conseguir le llegada de los equipos y materiales a sus áreas para llevar adelante los trabajos.
El mayor problema es que Santa Cruz tiene cerrada la frontera con Chubut debido al incremento en los casos de coronavirus que se han dado allí. Esto está provocando inconveniente en el arribo de las herramientas y perfilajes necesarios para los pozos que vienen desde Neuquén y los sets de fractura que deben trasladarse desde la provincia vecina.
“Tenemos que gestionar permisos especiales para que los dejen pasar, que llevan tiempo, y cuando cruza el personal les exigen hacer dos semanas de cuarentena, lo que dificulta mucho las tareas, porque muchos vienen a descargar y tienen que retornar de muevo a sus provincias”, resalta la misma fuente.
En esta primera etapa, la compañía planea invertir cerca de 55 millones de dólares y trabajar con un equipo de perforación. En caso de que pueda implementar la segunda fase, sumaría otro set más, lo que requeriría un desembolso extra de unos 30 millones, concluye.
Fuente: Desarrollo Energético.