«Debemos aprovechar la ventana de la transición energética, tanto con el gas como también con el GNL»
El estudio de abogados Martínez de Hoz & Rueda (MHR) organizó el segundo Gas Day en la Argentina. Se habló del estado actual, los potenciales negocios y el futuro del sector energético. El rol del gas y el GNL.
El estudio de abogados Martínez de Hoz & Rueda (MHR) organizó el segundo Gas Day en la Argentina en el que se presentó el estado actual y futuro del sector energético con enfoque local y regional.
Durante el encuentro se discutieron temas como el almacenamiento subterráneo de gas como un nuevo nicho en el mercado del gas argentino, el impacto del conflicto entre Ucrania y Rusia sobre el Cono Sur y la situación del gas en Europa. Pero, además, se habló del futuro mercado de GNL y el posible regreso de acuerdos de venta a largo plazo, y de la importancia del gas en la transición energética de la Argentina y cómo puede contribuir a cumplir los compromisos contra el cambio climático asumido por el país. Según los cálculos de los abogados, el negocio del gas y el GNL tiene un potencial para generar u$s30.000 millones por año.
El foro a puertas cerradas contó con la participación de más de 50 analistas y empresarios locales, de América Latina, Europa y Asia. Luego, este medio tuvo la posibilidad de dialogar con los tres socios fundadores de MHR José Martínez de Hoz, Pablo Rueda y Tomás Lanardonne, que además es manager en la oficina de Neuquén del estudio.
Periodista: ¿Qué potencial tiene el gas en la Argentina?
Estudio MHR: Los recursos no convencionales de gas natural de la Argentina en Vaca Muerta son los segundos más grandes a nivel mundial. Los operadores internacionales no tienen dudas acerca de la magnitud de los recursos de gas natural y las calidades de la formación de Vaca Muerta. Además, el país ha dado sobradas muestras de su capacidad de reducir significativamente los costos de desarrollo y la productividad de los pozos.
P.: ¿Creen que hay una puja entre abastecimiento interno y exportación?
Estudio MHR: la Argentina cuenta con los recursos de gas natural suficientes para cubrir más de un siglo y medio del nivel actual de demanda, por lo que los proyectos de exportación no colisionan con la cobertura de la demanda interna. Por el contrario, los proyectos de exportación funcionan como un ancla para atraer inversiones para desarrollar esos recursos. Pero nuestro país necesita inversiones para extraer esos recursos y montar un desarrollo a gran escala que debido a las limitaciones del tamaño del mercado interno depende de su éxito en exportar su producción como gas natural vía gasoductos o como GNL.
P.: ¿Qué falta para lograr un proyecto de GNL argentino?
Estudio MHP: Es imprescindible la formación de un consenso político que permita la aprobación de un marco legal con condiciones adecuadas para la inversión, incluyendo un marco regulatorio favorable a la exportación que permita la venta al exterior en condiciones firmes (los 365 días del año) en condiciones competitivas. Es decir, sin retenciones, y que asegure la libre disponibilidad de divisas que es indispensable para el financiamiento de la infraestructura necesaria para cualquier proyecto de GNL, incluyendo plantas de licuefacción, instalaciones portuarias, gasoductos dedicados y desarrollo up-stream.
P.: ¿Qué cambiaría si la Argentina accede a ese proyecto de GNL?
Estudio MHR: Si se lograra ese objetivo, en cinco a ocho años, la Argentina podría incrementar su producción entre 100 y 130 millones de metros cúbicos diarios que se requerirían para suministrar una planta de licuefacción con una capacidad de 25 MTPA, y la construcción de gasoductos asociados a ese proyecto, lo cual requeriría inversiones superiores a los u$s15.000 millones de dólares.
P.: ¿Y cuál será el aporte de las exportaciones?
Estudio MHR: La exportación de GNL, sumada a volúmenes exportables adicionales de gas natural, generaría saldos exportables muy significativos, que se estiman en alrededor de u$s30.000 millones anuales, lo que significa más de una tercera parte del valor de las exportaciones de 2021. A ello se agregarían mayores regalías para las provincias, incremento en la recaudación impositiva, y la reactivación de la economía y del mercado laboral.
P.: ¿Qué proyecciones de negocios se pueden hacer hasta 2030?
Estudio MHR: Las proyecciones mencionadas dependen no solo de la creación de las condiciones mencionadas, sino de estabilizar la macroeconomía, para lo cual es imprescindible reducir sustancialmente la inflación, normalizar el mercado de cambios eliminando la brecha actual y el cepo, y mejorar la solvencia fiscal reduciendo el gasto público. Mientras tengamos un Estado insolvente siempre existirá el riesgo de que el gobierno de turno altere las reglas de juego (obsolescing bargain) para cubrir sus necesidades de financiación. Si bien algunos de estos riesgos pueden mitigarse por vía de garantías emergentes de una ley del Congreso especial para la exportación de GNL y gas natural, la fortaleza y credibilidad de largo plazo que permitirá multiplicar inversiones y lograr financiamiento a largo plazo en condiciones competitivas, dependerá de que se eliminen los factores que incentivan conductas oportunistas
P.: ¿Cuánto aportará la construcción de la primera planta de GNL propia?
Estudio MHR: La Argentina se encuentra en condiciones para comenzar a transitar el camino que la conduzca a tener una o más plantas de licuefacción que le permitan convertirse en un proveedor de energía internacional confiable. Es un proceso largo, que involucra de 5 a 10 años según muestra la experiencia de otros países, pero factible si se logran los consensos políticos que permitan crear las condiciones descriptas. Cuánto antes se comience a transitar ese sendero, antes se podrán cumplir los objetivos para lograr aprovechar las oportunidades que brinda la coyuntura internacional actual con niveles de precios muy atractivos. Pero no disponemos de tiempo ilimitado para ello, pues debemos aprovechar la ventana de la transición energética durante la cual el gas natural y el GNL que son considerados energías de transición desempeñarán un rol gravitante, máxime considerando las necesidades de Europa de independizarse del suministro de Rusia que hasta el año pasado proveía el 45% del gas de la Unión Europea y el 55% del gas de Alemania.
P.: ¿Es una oportunidad única?
Estudio MHR: Esta ventana, cuya extensión temporal posiblemente se haya extendido por las circunstancias mencionadas, no será eterna, y de no aprovecharse la Argentina perderá la posibilidad de monetizar sus enormes recursos de gas natural.
Fuente: Ambito