Desafío a CAMYEN
Capaz que ahora le entre el apuro a las autoridades de la sociedad del Estado Catamarca Minera y Energética (CAMYEN).
Como trascendió que Yacimientos Petrolíferos Fiscales (YPF) podría implementar políticas para tratar de convertirse en un actor de peso en la minería a gran escala, se sentirán acaso habilitados para intentar meterse en el asunto. Pero convendría que le metan pata: en el diseño nacional de poder bifronte, la petrolera quedó bajo el dominio de La Cámpora, agrupación ultrakirchnerista que no se caracteriza precisamente por su mesura al momento de engullir; y no hay que confiarse en las posibilidades de mediación del presidente Alberto Fernández, que al parecer están bastante menguadas.
Cocodrilo que se duerme es cartera. Pese a que casi el 50% del padrón minero catamarqueño, como informó El Ancasti, está flojo de papeles, ni el Gobierno ni CAMYEN, empresa creada en 2012 precisamente con el objeto de intervenir y mejorar las posiciones del Estado en el negocio minero, se han mostrado hasta ahora interesados en recuperar los pedimentos disponibles por la falta de pago de sus concesionarios. Esta inopia es por demás llamativa cuando desde hace varios años viene sonando el cencerro del litio.
La arremetida de YPF abre otros horizontes. Faltaría que algunos de los concesionarios que han venido manteniendo los derechos sobre los pedimentos de litio sin poner un peso los negocien con los camporistas de YPF, y que después las autoridades mineras provinciales vendan como una gran demostración de que la minería es “política de Estado” el hecho de entrar a la cola a cambio de regalías o de unas utilidades “a pillar”.
Guarda al hilo. La prensa nacional informó que Minería de la Nación profundizó el diálogo con YPF y ya se discute el modo para transformar a la petrolera bajo control estatal en un actor de peso en las explotaciones mineras a gran escala.
El secretario de Minería Guillermo Hensel ya estaría en tratativas con el presidente de YPF, Guillermo Nielsen. » Es una idea que surge de la capacidad técnica de la empresa, que puede ser muy útil para la minería. Hay experiencia y profesionales que conocen. Además, al ser nuestra empresa de bandera, y teniendo en cuenta el prestigio que tiene, también es una buena opción para asociarse con empresas extranjeras que operan en el país «, se entusiasman en Minería.
El desembarco fuerte de la empresa bajo control estatal en el extractivismo minero se llevaría a cabo mediante la Compañía de Inversiones Mineras SA (CIMSA), unidad de YPF que ya controla un entramado de canteras con las que provee de arena silícea a las compañías que hacen «fracking» en la cuenca de hidrocarburos no convencionales Vaca Muerta.
“De consolidar la idea a través de CIMSA, el Gobierno abrirá un nuevo horizonte financiero para YPF, dado que la unidad minera reuniría todas las condiciones para cotizar en bolsa. Este cambio, igualmente, no modificaría en absoluto el rol de proveedores de insumos para el sector minero -combustibles y lubricantes- que la empresa se ocupó de acentuar en las últimas dos décadas”, consignó el portal “iprofesional.com”.
La pregunta cae por sí sola: ¿Qué impide a CAMYEN asumir una posición más agresiva para insertarse en el promisorio universo de la minería?
Como brazo empresario del Gobierno catamarqueño, tiene más herramientas que YPF para configurarse una posición favorable en el mercado con el propósito de asociarse a los inversores privados.
Y si bien CAMYEN fue fundada en 2012, el Estado provincial puede hacer jugar su experiencia en la explotación del litio en Salar del Hombre Muerto como socio de Minera del Altiplano, hoy reconvertida en Livent.n
Fuente: El Ancasti.