Después de tres meses en operaciones se fue el barco regasificador Exemplar del puerto Ingeniero White de Bahía Blanca
El navío estuvo amarrado para cubrir el pico de demanda de gas natural durante el invierno. Un viaje al pasado dio.
Su vuelta, después de dos años, generó críticas, pero sirvió a efectos de un ahorro de dólares y una baja en el costo energético. Finalmente significó un ahorro de u$s 255 millones en importaciones de energía.
Su regreso al sur bonaerense, de donde había partido en octubre de 2018 con el anterior Gobierno, fue criticado pero justificado. Parecía simbolizar una imagen del pasado que con el ex presidente Mauricio Macri se había dejado atrás. Sin embargo, en lo que refiere a lo práctico del nuevo viejo plan su operación permite sustituir importaciones de combustibles más caros que el propio gas licuado.
La llegada en junio Exemplar, de la empresa estadounidense Excelerate Energy, generó un ahorro final de u$s 255 millones para el país en importaciones de energía, ante la posibilidad de consumir fuel oil y gas oil, combustibles líquidos que son más caros para el sistema (casi u$s 15 por millón de BTU) además de ser mas contaminantes con el medio ambiente.
Aunque parece ser temprano para las sacar conclusiones, los técnicos oficiales y expertos energéticos creen que es probable que en el invierno de 2022 se vuelva a contratar el barco para tener un respaldo en el pico de consumo, ya que la producción nacional y la capacidad del sistema de transporte de gas no puede satisfacer toda la demanda en los meses más fríos.
Con la producción de gas en crecimiento y las alternativas de compras a Bolivia y el gas licuado que entra por Escobar (un barco que está operativo sin interrupciones desde 2010), el regreso del buque Exemplar a Bahía Blanca y el ingreso de energías renovables no alcanzaron para evitar masivas importaciones de líquidos para el funcionamiento de las centrales termoeléctricas. Entre enero y julio de 2021, las compras de gasoil y fuel oil sumaron u$s 595 millones, el valor más alto desde 2016 y el volumen más alto desde 2017 para el mismo período. Cabe también la aclaración que dichas compras fueron necesarias por la menor generación hidroeléctrica de la represa Yacyretá y las centrales de Neuquén, afectadas por sequías.
En los tres meses que fueron de junio a agosto de este año, el barco regasificador suministró el equivalente a 1129 millones de metros cúbicos (MMm3) de gas natural con un promedio de 12,55 MMm3 al día. El Gobierno pagó u$s 12 millones para cubrir los costos fijos de operación y un total de u$s 120 millones por todo el contrato.
La tripulación del Exemplar fue 100% argentina y recibió 14 cargamentos de gas licuado provenientes de Estados Unidos y Qatar, por el que se destinaron u$s 345 millones a un costo promedio de u$s 7,95 por millón de BTU.
Según consta en los registros de Integración Energética Argentina (Ieasa, ex Enarsa), las importaciones de gas licuado ascenderán en todo 2021 a u$s 1096 millones por un costo promedio de u$s 8,33 por millón de BTU.
Para una referencia de otras fuentes de energía, las compras a Bolivia treparon a u$s 590 millones en lo que va del año y rondarán los u$s 1000 millones en todo 2021, a un promedio superior a los u$s 6 por millón de BTU. El gas natural producido en el país se le paga a las petroleras en torno a los u$s 4 por millón de BTU, monto que ronda los u$s 5 en invierno.