EE.UU. estudia pagar a sus empresas petrolíferas para que dejen el crudo bajo tierra
Según fuentes de Bloomberg, la Administración Trump compensaría a las compañías por no extraer el petróleo y que estos hidrocarburos pasen a fomar parte de la reserva nacional para situaciones de emergencia.
Washington está evaluando la posibilidad de pagar compensaciones a las petroleras estadounidenses para que no extraigan crudo. El objetivo es evitar la superabundancia en el mercado, que provocó la caída de los precios y empujó a la quiebra a algunas compañías perforadoras, informa Bloomberg citando a sus fuentes.
Según un alto cargo de la Administración Trump, quien habló bajo condición de anonimato, el plan fue elaborado por el Departamento de Energía de EE.UU. Las compensaciones se destinarían a que las empresas se abstengan de 365 millones de barriles de petróleo, que pasarían a engrosar las reservas del Gobierno para situaciones de emergencia, de acuerdo a las fuentes de Bloomberg.
Actualmente, la legislación estadounidense permite al Departamento de Energía reservar sin limitación alguna hasta 1.000 millones de barriles de petróleo para casos de emergencia. Jurídicamente, esto permite conservar el crudo fuera de la reserva nacional, así como bloquear su extracción. Lo que haría el Gobierno es comprar los hidrocarburos para que permanezcan bajo tierra, asegurándose de que los productores no los extraigan, explica la agencia.
Sin embargo, para poder llevar a cabo el plan hacen falta miles de millones de dólares de asignaciones por parte del Congreso. Cabe destacar que recientemente los congresistas se negaron a conceder 3.000 millones de dólares para la compra de petróleo para la reserva estratégica, recuerda Bloomberg.
Según la agencia, el pasado 3 de abril Donald Trump solicitó a su secretario de Energía información sobre maneras alternativas de conservar el petróleo. Las fuentes de Bloomberg detallan que se baraja la opción de acumular el crudo en depósitos flotantes, en tanques de almacenamiento no utilizados en refinerías y en cavernas de sal subterráneas.