La calidad del capital humano en el sector Oil & Gas fue uno de los factores que aceleró la curva de aprendizaje en la producción en yacimientos no convencionales. Mariano de la Riestra, socio de Tecnopatagonia, es un exponente de esa calidad profesional.

En una mano a mano con IMPACTO ECONÓMICO expuso la importancia de compartir conocimientos y experiencias, las materias pendientes para aumentar la productividad, la visión de los inversores extranjeros y la necesidad de crear condiciones adecuadas para desarrollar en gran potencial de Vaca Muerta.

¿Cómo evaluás el desarrollo de Vaca Muerta?

Compartir información implicó un avance de nivel en la conciencia de todas las operadoras. El tema de las etapas de fractura es un caso muy evidente. En otro momento era impensado que yo te comparta cuántas etapas de fractura hice. Hoy es irrelevante, porque la clave está en el diseño de la fractura, no si hice 8 para Daniel Oil company o 10. Te lo digo, no pasa nada…

La curva de aprendizaje observó una fuerte aceleración…

Sí, y la curva de aprendizaje tuvo que venir acompañada de gente con una conciencia en decir “empecemos a compartir”. Y creo que el próximo nivel de mejora es con respecto a ese compartir información. No se es más rico por pagar menos dólares por un equipo de perforación, por un trépano o el servicio de entubación. El negocio no está solamente en una cuestión de tarifa. Puedo ganar más dinero en el corto plazo. Pero podemos ser más ricos todos si la información la ponemos en comunidad, ayudamos a que quienes entregan valor tengan su parte, haciendo que haya más producción y petróleo rentable y más desarrollo para Vaca Muerta.

Se aumenta el stock de conocimientos y experiencias compartidas…

Y ampliás la torta, producto de expandir el conocimiento. La torta se incrementa por compartir conocimientos, no por concentrar la información. La anterior era: “yo guardo la información, no la comparto y soy más poderoso”. Eso era en el convencional. La lógica del shale es otra…

¿Cómo desarrollar el potencial de Vaca Muerta?

Desde Tecnopatagonia tenemos varios módulos en la cadena de negocios. Uno es seguir las torres de perforación. Marcan el ritmo con el que se hacen los pozos. Una vez realizada esta tarea, si no los fracturamos y terminamos, no va a pasar nada. También seguimos las fracturas, no solo las etapas, sino también los volúmenes de arena. Las etapas siguieron creciendo y este año lo seguirán haciendo.

¿Dónde poner el foco para aumentar la productividad?

Todavía hay una capacidad ociosa del 25%. Si compartimos los cronogramas, probablemente tengamos una mejora. Después tenés otra etapa durante la producción. Ya hay una mayor producción de petróleo no convencional que convencional. Lo mismo ocurre con el gas. Y el ritmo de crecimiento no solo compensa el declino del convencional, sino que aumenta la producción total.

Hagamos un doble click ahí: perforación, ¿hay equipos?, sí, hay equipos. ¿Necesitan inversiones?, sí, porque necesitás llevarlos a una tecnología superior, con la parte de hidráulica, para llevarlos de 5000 a 7500 de psi para hacer las ramas horizontales de 3000 metros. En equipos tenés una oportunidad, en fracturas tenés una oportunidad. En producción tenés otra oportunidad. Si me voy a una etapa anterior a los equipos, los tiempos en obtener los permisos de locación…

¿Qué otras áreas de mejora identificás?

Hay un desafío de mejorar la planificación. Si Scaloni no planifica los partidos, pierde antes de entrar a la cancha, por más que lo tenga a Messi. Quizás después tenés que hacer ajustes durante el partido, pero planificar es clave.

Las empresas privadas deben poder prever con mayor certeza los cronogramas y planes de perforación y terminación, ya que tiene consecuencias directas. Las operadoras petroleras tienen ciertos desafíos en la planificación, un caso, por ejemplo, son los permisos provinciales y el impacto en los cambios de cronogramas. Los cambios y las modificaciones impactan en la planificación y la ingeniería.

Si se trabaja con planes firmes y mejor planificación tendremos mejores pozos, menos NPT y todo más ordenado. El orden baja los costos.

¿Hay margen de desarrollo para el convencional?

Sí. Para las grandes empresas, si no tienen campos muy automatizados, el convencional no les resulta rentable. Los gobiernos provinciales lo entienden perfectamente, les sacan las áreas secundarias a las empresas grandes y se las dan a las empresas chicas, como hizo Vidal en Santa Cruz. Es para empresas que tienen otra dinámica. Serán necesarios los consorcios de empresas. Es armar una red. Ya pasó en otros lados, no hay que inventar nada.

En Argentina hay potencial para el convencional. Requiere otro sistema de regalías, no pedir tantos avales, no cobrar las regalías por adelantado. Podría haber una explosión de producción, si ofrecés condiciones favorables… No hay escasez de inversiones, hay escasez de condiciones

¿Cómo estimás el nivel de actividad para este año?

Por definición, a los cisnes negros no los vemos. Repaso lo que pasó en los últimos años, omitiendo el factor pandemia-cuarentena. En 2022 se perforó por encima de lo planificado, se invirtió más y vino acompañado por mejores resultados. En 2023 ya se estabilizó, con números más grandes, por sobre el presupuesto. Este año volverá a crecer la producción, al menos es lo que está en los presupuestos. Percibo que habrá un crecimiento moderado con respecto a 2023, que fue un año récord. Tendremos un nuevo récord.

Un panorama alentador entonces…

No nos empantanemos con la visión de un récord. Nos engañamos si vemos el 2024 como un logro histórico. Por dos motivos: este nuevo récord es muy poco con respecto a lo que podemos hacer. Y en 2024 todavía no va a estar impactando un escenario claro de hacia dónde se perfila el país. Todavía la tengo que hacer “con la mía”, para decirlo en forma coloquial, con lo cual el crecimiento será moderado.

¿Qué falta para un mayor desarrollo?

Si nos alineamos con el sector que tiene un flujo de inversiones potenciales, el crecimiento será exponencial. En Vaca Muerta no hay riesgo geológico, cada pozo genera petróleo, algunos más y otros menos, el “success rate” es casi del 100%. La tecnología, los equipos, el know-how, están. Faltan condiciones claras a futuro.

¿Cómo nos ven los inversores del exterior?

Abrimos una LLC de Tecnopatagonia en Estados Unidos. En 2 meses hemos recibido la misma cantidad de preguntas que en 18 meses anteriores, para empezar a entender el mercado argentino.

El tema es que Argentina tiene vaivenes, hasta hace un rato éramos amigos de Irán y Venezuela y ahora somos amigos de Estados Unidos, Israel y Europa. Si soy un inversor me pregunto: “¿en dónde estamos?”.

En Argentina tenemos alrededor de 60 empresas productoras. En Estados Unidos, 13.000. Esas empresas tienen liquidez.

Imprescindible aumentar la cantidad de empresas…

Sí. Pongamos como objetivo para el 2025 superar las 100 / 120 empresas. Permitirá que haya más gente que participe del negocio. Cuantos más jugadores participen, más abriremos la cabeza, vendrán nuevas ideas, nuevos aprendizajes, vendrá performance, producción, petróleo, dinero… En el mundo, lo que produzcamos lo comprarán.

Nos ponemos contentos porque 2024 será récord –y está bien que nos pongamos contentos– pero es muy poco en relación a lo que podemos hacer. En Estados Unidos, cuatro personas que invierten y agarran siete pozos, pueden ser petroleras.

¿Con respecto al sector público?

De los stakeholders, quien más puede mejorar las condiciones es el Estado, tanto nacional, provincial y municipal. Por el régimen de importaciones, permisos de locación, visión a largo plazo. Corriéndose de algunas inversiones que tienen que empujar desde el Estado a que las hagan los privados.

¿Coincidís en que es fundamental la libertad para importar?

Por cuestiones del cepo a las importaciones, hoy la calidad de los repuestos está influyendo en los tiempos no productivos. Parte de los tiempos no productivos que tienen las torres de perforación, los sets de fractura, y la merma que viene de la producción asociada, tiene que ver con la calidad de los repuestos.

Hay quienes plantean que la sustitución de importaciones impulsa el desarrollo local…

Es una mente chiquita, el desarrollo local se va a producir cuando se agrande el pastel, no cuando me obligues a comprar una empaquetadura u otro repuesto local, que duran menos, lo cual disminuye la rentabilidad. Con ese esquema no se le puede decir a los inversores que la pongan acá en lugar de otro país.

¿Y en cuanto a estimación de volúmenes de producción?

Hoy Vaca Muerta superó los 800.000 barriles equivalentes día (petróleo más gas) ¿Cómo no vamos a llegar, en un año y pico, al millón de barriles equivalentes/día en Vaca Muerta?

Solo en petróleo, tenemos que triplicar la producción actual, de 300.000 a casi un millón. Eso también se puede hacer, pero necesitamos otros contratos de largo plazo para producir, otros canales de distribución, para colocarlos en el mundo. Para eso tenemos que ser creíbles, no que venga un gobierno que diga: “no se exporta más, queda para el mercado interno…”.

Cuando seamos coherentes en el largo plazo, eso vendrá solo, porque en Vaca Muerta, cada vez que hacés un pozo el petróleo está, no hay error.

Podemos quintuplicar la producción actual. Lo que falta es claridad en el largo plazo.

La famosa previsibilidad…

Exacto, cuando mejore esa previsibilidad va a mejorar la claridad en la planificación. Y cuando mejora la claridad en la planificación, como consecuencia, en un efecto dominó, va a mejorar la ingeniería de cada una de las empresas. Siempre que contemos con el tiempo necesario. Se necesita planificación. Tenemos récord de perforación en menos de 15 días, en pozos de rama horizontal, sumado a los 3.000 metros que hay que bajar, son 6.000 metros… Es excelente en cualquier lugar del mundo…. Lo sabemos hacer.

¿Cómo podemos hacer para ampliar este esquema?

Dejando que la planificación haga su puesta en valor.

MARIANO DE LA RIESTRA

Es Ingeniero Industrial (UCA). Cursó el Programa de Desarrollo Directivo del IAE. Posee una sólida trayectoria de más de 20 años en el sector Oil & Gas, en Tenaris, Weatherford e YPF. Fue director comercial de un consorcio de empresas de servicios petroleros en el golfo de México. En la actualidad se desempeña como socio gerente en Tecnopatagonia. Fundador de MR Proyectos y Capitales (México).

Fuente: MARIANO DE LA RIESTRA para el Perfil