La iniciativa incluye la eliminación de impuestos y otros incentivos financieros. Se enfoca en promover las inversiones en pozos de mediana o baja productividad, inactivos o cerrados, con el propósito de aumentar la producción de hidrocarburos líquidos.

El Régimen de Promoción de areas maduras

El Gobierno confirmó este sábado a fuentes oficiales que envió al Congreso un proyecto de ley con el propósito de incentivar las inversiones en las áreas maduras de hidrocarburos.

El ministro de Economía y candidato a presidente, Sergio Massa, había anticipado días atrás la iniciativa, cuyo objetivo incluye la eliminación de impuestos y otros incentivos fiscales relacionados con la explotación convencional en cuencas maduras.

Según el plan, el Régimen de Promoción de Áreas Maduras tiene como objetivo aumentar la producción de hidrocarburos líquidos en áreas maduras o en pozos con baja productividad, inactivos o cerrados, o en áreas de media o baja productividad.

De acuerdo al texto de la iniciativa, el proyecto “atiende la situación específica de diversas áreas hidrocarburíferas en nuestro país que han visto reducido sostenidamente su nivel de actividad no solo por motivos económicos” sino “también por cuestiones técnicas e incluso geológicas”.

El gobierno señaló que esta situación «repercute indefectiblemente en el sostenimiento de las fuentes de trabajo que son directas e indirectas».

En términos oficiales, hay una cadena de 10.000 empresas que proveedoras de petróleo y gas, y el 80% de ellas tienen pymes.

En ocasiones de su desarrollo masivo en la gigantesca formación de Vaca Muerta en el suroeste del país, Argentina experimenta una fuerte expansión en el segmento de hidrocarburos no convencionales, eso que motiva el proyecto.

Aunque «compite» por capital e insumos con la actividad no convencional, con una caída de la producción convencional del 5% interanual, este dinamismo presiona las explotaciones convencionales, según las autoridades argentinas.

El plan de incentivos propuesto tiene un período de implementación de diez años y, entre otras cosas, permite a las compañías petroleras con nuevos proyectos de inversión exportar el 50% de su producción incremental sin estar sujetas a impuestos a la exportación y, a su vez, importar bienes sin tener que pagar importaciones.