El Gobierno rescindiría 14 contratos de energías renovables firmados en la gestión anterior que no avanzaron en la construcción
La Secretaría de Energía que conduce Sergio Lanziani está evaluando la situación de los proyectos de energías limpias adjudicados durante el Gobierno de Mauricio Macri que no mostraron avances de obra y acumulan penalidades millonarias.
Una de las tareas que ordenó Sergio Lanziani a poco de asumir en funciones fue solicitar a las distintas dependencias involucradas en el área de la generación eléctrica la revisión de los contratos firmados entre 2015 y 2019.
Tras un mes de encabezar la gestión, su cartera analiza enviar la primera señal contundente al mercado de las energías renovables: rescindiría 14 contratos que presentan dificultades para avanzar en la construcción por 470 MW de potencia.
Se trata de aquellos PPA que ya transcurrieron los 180 días reglamentarios que prevé el pliego de licitación para “reflotar” el proyecto y que están apilando multas millonarias y en dólares.
“Hay 1.000 MW que podríamos liberar en el corto plazo”, amplió una fuente oficial que prefirió no ser citada en la nota, considerando los distintos planes que se lanzaron en los últimos cuatro años.
En línea con esta instancia de evaluación, la Secretaría de Energía solicitó a la Compañía Administradora del Mercado Eléctrico Mayorista (CAMMESA) que brinde detalles sobre el estado de los incumplimientos, proyecto por proyecto.
Exclusivamente en la Ronda 2 del Programa RenovAr, se detectaron 30 emprendimientos que no respetaron al menos un hito de los que plantea el pliego de licitación, ya sean: la fecha programada de cierre financiero, el comienzo de construcción o el principio efectivo de ejecución.
Energía Estratégica averiguó cuáles son las sociedades que están fuera de término: Nicanor Energías Renovables, Biocañas, Bioeléctrica General Alvear, Renovables El Mangrullo, Helios Energía Limpia, Biogás de James Craik, Biogás de Recreo, Biogás de San Francisco, Biogás de Bella Italia, y Liuco Energía.
También figuran Bioetérmica Las Lomitas, Biomasa Rojas, Biomasa Vendo, Butaco Energía, Santo Tomé Kuera, Cañada Honda IV Solar, Añatuya Solar, Parque Solar Villa María, Parque Solar Cura Brochero, Parque Solar Los Zorritos, Kuntur Energía, Parque Solar EPEC Arroyo Cabral, Verano Capital Solar, Sol de Cuyo, Andina Solar, Huaco Solar, Parque Eólico Pampa, Parque Eólico General Acha.
Proyectos complicados
Las centrales térmicas que figuran con demoras son “Don Nicanor”, “Biocaña”, “General Alvear”, “El Mangrullo”, “Pollos San Mateo”, “James Craik”, “Recreo”, “San Francisco”, “Bella Italia”, “Las Lomitas”, “Rojas”, “Venado Tuerto”, y “Kuera Santo Tomé”.
Los pequeños aprovechamientos hidroeléctricos que se encuentran en esta situación son “Salto 11” y “Las Tunas”.
También los parques solares “Nonogasta II”, “Nonogasta IV”, “Villa Dolores”, “Añatuya I”, “María del Río Seco”, “Cura Brochero”, “Los Zorritos”, “Zapata”, “Arroyo del Cabral”, “Verano Capital One”, “La Pirka”, “Ullum X”, y “Tocota”.
Y los parques eólicos “Pampa Chubut” y “General Hacha”.
En total, estas centrales de energías limpias suman 815 MW, lo que representa aproximadamente el 40% de los emprendimientos adjudicados durante la Ronda 2 del Programa RenovAr (88 proyectos por 2.043 MW)
Cabe recordar que el precio promedio en esta tanda resultó en 51,48 dólares por MW/h, muy por debajo de lo que se venía pagando en el mercado.
Sin demoras, fuentes oficiales informan que existen aproximadamente 2.500 MW. Y si bien estas empresas están conforme a las condiciones que plantea el cronograma de las licitaciones, tampoco en el oficialismo descartan que haya inconvenientes a futuro, debido a la crisis económica-financiera que atraviesa el país.
Más de 1.000 MW se encuentran operativos, inyectando energía a la red.
Solución legal
En este escenario, el equipo de Lanziani estudia cómo resolver los contratos pendientes, barajando distintas opciones que estarían estructuradas bajo una nueva resolución que reconocería la emergencia económica-financiera que vive el país, y sus consecuencias sobre el sector de renovables.
En este paquete, una alternativa es que se establezca una multa “mínima” a los contratos que quieran rescindirse con el acuerdo de los privados.
¿Se flexibilizan las sanciones? Lo que en realidad busca el Gobierno es evitar litigios con arbitrajes internacionales, el seguimiento de proyectos que no conducen a buen puerto, el malgasto de recursos administrativos, y los honorarios de los estudios de abogados.
Además, mientras esté saturada la capacidad de transporte en alta tensión se torna imposible el lanzamiento de nuevos programas para seducir inversiones.
Quizás el riesgo para la industria de las energías renovables sea que esa capacidad de transmisión sea reorientada en el futuro hacia la generación eléctrica a base de gas natural de Vaca Muerta, hoy en búsqueda de nuevos nichos de demanda.
Los que quieren seguir
Para las compañías que aún proponen continuar con la construcción de las centrales de energías renovables, la idea del Gobierno es brindarles la posibilidad de que incorporen algún instrumento financiero de cobro real ante futuras irregularidades, como podrían ser las cartas de crédito.
Esto, claro está, brindando mayor plazo para la entrada en operación comercial.
Es que la expectativa de algunos empresarios es conseguir financiamiento internacional, a pesar que hoy en día permanece clausurado para una Argentina que el propio presidente Alberto Fernández reconoce como «virtualmente en default».
Podría ser, aunque siempre y cuándo el Gobierno logre una efectiva renegociación de la deuda externa y los bancos confíen otra vez en el país.
“Si se ejecutan las garantías quiebran todas las aseguradoras”, explica una fuente que está al tanto del proceso. Y a priori, la idea del Estado no es hacerse de los recursos que establecen las multas, sino “ordenar” el mercado y recuperar la infraestructura eléctrica.
¿Debiera aplicarse este mecanismo a todas las licitaciones? En 2016, cuándo se lanzaron las rondas 1 y 1.5, por caso, ¿También había inconvenientes macroeconómicos? ¿O las demoras obedecen a mera especulación de los privados?
Son acusaciones cruzadas y hay debate sobre este aspecto, por eso la cartera de Lanziani está convocando a revisar “caso por caso” para entender la situación de las firmas involucradas.
Sobre lo que no hay dudas es la Ronda 2 del Programa RenovAr: se tuvieron que firmar contratos en mayo de 2018, justo cuándo Argentina quedó fuera del acceso al crédito en el exterior y terminó en un nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
No obstante, a priori todo indica que el paraguas legal sería extensivo a todas las subastas del Programa RenovAr.
MATER, punto y aparte
Con el objetivo que los generadores ofrezcan energía limpia a los Grandes Usuarios, la Secretaría de Energía, junto a Cammesa, estructuró subastas trimestrales que se vienen desarrollando desde finales del 2017.
En cada certamen, los generadores solicitan prioridad de despacho sobre puntos específicos en las líneas de transmisión eléctrica y, de acuerdo con la capacidad disponible y la cantidad de ofertas, Cammesa otorga prioridad de conexión para habilitar las centrales.
Hasta el momento, se han adjudicado 49 proyectos, por un total de 1.164,4 MW. Sin embargo, al igual que en el Programa RenovAr, hay emprendimientos que también están con complicaciones para iniciar obras.
“Más de la mitad no mostraron ningún tipo de avance”, calculan en el Gobierno. Y tampoco se espera que lo hagan en el corto plazo, ya que hay incertidumbre sobre las tarifas que recibirán los distintos tipos de usuarios, mientras tanto, congeladas hasta junio.
En este escenario de incertidumbre se descarta que exista el interés de industrias o comercios en cerrar contratos de compra de energía eólica o solar a 10 años.
Los números del sector
Nobleza obliga, cabe mostrar los resultados que tuvo el sector en los últimos cuatro años, por eso Energía Estratégica comparte una columna de opinión (Ver) que elaboró Sebastián Kind, ex Subsecretario de Energías Renovables de la Nación, publicada el 20 de noviembre de 2019, en la que refleja los números de su gestión, entre 2015 y 2019.
Aquí algunas estadísticas que reflejó el ex funcionario:
“El Gobierno Nacional ha trabajado fuertemente en los últimos años en este sector para que la Argentina se convierta en un destino seguro y atractivo para la inversión, al mismo tiempo que favoreciendo la competitivad y la baja de los precios de la energía generada, llevándolos a niveles internacionales que sólo suceden en los mercados más desarrollados del mundo”.
“En 4 años se adjudicaron 250 proyectos a través de procesos públicos, que representan más de 6.400 MW de nueva capacidad renovable (20% del parque generador de alta potencia) a instalarse en 21 de las 24 jurisdicciones, brindando energía eléctrica para más de 6 millones de hogares”.
“Desde 2016, y habiendo ya completado todo el ciclo desde la regulación hasta la puesta en marcha de proyectos, pasando por la financiación y la construcción, 60 nuevos parques renovables ya generan energía limpia para más de 1,7 millones de hogares, con una inversión genuina directa de 2.700 millones de dólares”.
“Además, otros 95 parques se encuentran en plena construcción, proyectando su entrada en operación comercial, en su gran mayoría, durante el año 2020, a un promedio de 2 por semana, con una inversión adicional en curso de más de 4.800 millones de dólares. Una vez concluidos, iluminarán a otros 3,1 millones de hogares argentinos”.
“Con 5.000 MW en curso real en lo que hace a alta potencia, una penetración promedio que se estima alcanzará el 12% de la demanda en los primeros meses de 2020, sumado a la fabricación local, a los puestos de trabajo, a las incorporaciones de equipos para la autogeneración, con una gran concientización sobre el uso eficiente de los recursos y con el avance en la erradicación de la indigencia energética en nuestro país, podemos afirmar que se trata de un sector que hoy es una realidad tangible e incuestionable en la Argentina, al igual que en el resto de los países más avanzados del mundo, donde la conciencia por el uso de los recursos es total y donde ya se instala más generación renovable que de cualquier otra fuente incluyendo la tradicional fósil”.
“Esta verdadera revolución también se manifiesta en la creación de más de 11.000 nuevos puestos de trabajo tanto en la construcción y operación de los parques, como en la producción de aerogeneradores y diversos componentes para la industria renovable en general, a través del arribo a nuestro país de empresas líderes a nivel mundial con inversiones en 9 plantas de fabricación de equipamiento como es el caso de Vestas y de Nordex-Acciona, entre otros”.
“Esto sucedió gracias a un acertado fomento industrial que ha propiciado la instalación de capacidades productivas con metas escalonadas de integración de componente doméstico del 35 al 50%, tiempo para su incorporación y un incentivo dirigido a los generadores para llevarlos a inclinarse por el compre nacional; de esta forma, hemos sumado a la Argentina al selecto club de países con capacidad para la fabricación de equipamiento, tanto para abastecer al mercado local como para la exportación”.
Fuente: Energía Estratégica.