El juguete nuevo de Kicillof para auscultar a las eléctricas
Puso en marcha un sistema con el que podrá monitorear costos, inversión y estructura de las empresas. Lupa fina pre descongelamiento tarifario. Las claves.
En la antesala de lo que será el descongelamiento tarifario previsto para este año en la provincia de Buenos Aires, el gobierno de Axel Kicillof pone en marcha una nueva herramienta para realizar un monitoreo pormenorizado y transparente de costos y estructura de las empresas distribuidoras de energía eléctrica para, con esos datos en mano, discutir una actualización tarifaria ajustada a una real inversión prevista y ejecutada.
En medio de la seguidilla de tarifazos durante el vidalismo, en 2017 se había encomendado el diseño e implementación de un Sistema de Contabilidad Regulatoria que incluyera el seguimiento de la ejecución de inversiones. Para eso, la gestión Vidal contrató a una consultora, pero nunca se puso en funcionamiento, a pesar de los crecientes apagones que iluminaban interrogantes sobre la real inversión de las distribuidoras. Ya en la actual administración del Frente de Todos, la Dirección Provincial de Energía y el Organismo de Control (OCEBA) decidieron acelerar en la concreción de un software para evaluar el desempeño y nivel de eficiencia de las distribuidoras, homogeneizando la estructura contable de las mismas.
Se trata de una nueva herramienta en el ejercicio de la regulación y el control del Estado sobre la prestación del servicio público por parte de las distribuidoras. La información que allí detallen las empresas –a modo de declaración jurada– “será considerada a los fines del análisis de las próximas revisiones tarifarias”, según establece la resolución publicada este miércoles en el Boletín Oficial, donde se aprobó el plan y manual de cuentas de 199 páginas (ver abajo).
Mientras se mantiene el hermetismo en torno a la discusión de tarifas, las distribuidoras provinciales comenzaron a cargar sus datos en este sistema desde el 1 de enero, de forma obligatoria. En el caso de las distribuidoras municipales, la obligatoriedad regirá desde el 1 de julio y para aquellas con menos de 5 mil usuarios, a partir de 2022. Así, al momento, la medida solo involucra a grandes jugadoras como Edelap, EDES, EDEA y EDEN, todas ellas bajo el manto del Grupo DESA.
Se considerará “falta grave” meritoria de sanciones el incumplimiento de los plazos previstos, el falseamiento de la información y/o su no remisión en la periodicidad estipulada.
Según detallaron a Letra P fuentes de OCEBA, esta nueva herramienta tiene cuatro pilares. El primero es la contabilidad regulatoria propiamente dicha: todas las distribuidoras deben tener el mismo plan de cuentas y manual, independientemente del que tenga cada empresa. Allí, tienen que presentar la información contable tal como se solicita.
Desde el organismo de control a cargo de Marcelo Juiz consignaron como un segundo pilar los indicadores operativos, tales como la cantidad de empleados que posee cada empresa, en contraste con la cantidad de energía vendida, por ejemplo.
En tercer lugar, se hará foco en algo que la Provincia no tenía y es considerado de relevancia por la actual gestión: el inventario físico. Saber qué tiene cada compañía, desde el número de postes, y de qué material están hechos, hasta los kilómetros de línea de baja, media y alta tensión tendidos. Actualmente, esa información es manejada a medias por la Provincia, ya que cuentan con datos de las grandes empresas pero desconoce si están actualizados. Con eso, la Provincia puede evaluar el tiempo de vida útil de distintos materiales y discutir con las empresas la manera de renovarlos.
Un cuarto pilar radica en las unidades constructivas. Cada vez que una empresa necesite hacer alguna inversión en una instalación nueva, el objetivo de este ítem es que la Provincia sepa qué elementos componen esa nueva inversión y cuál es su costo marginal, referenciado de acuerdo a la tipología que tenga esa inversión. Con eso, la autoridad de aplicación puede evitar tergiversaciones o añadiduras de conceptos en una unidad productiva. Según pudo saber este medio, este punto fue un disparador de tensiones con las distribuidoras.
Enmarcada en esos cuatro conceptos, que engloban costos y estructuras, se centrarán las próximas negociaciones entre las empresas y el Estado provincial a la hora de discutir actualizaciones tarifarias. Aún no se brindaron precisiones sobre si este sistema ya estará íntegramente disponible para ser utilizado en la discusión tarifaria venidera, pero se subrayó que durante el primer trimestre estarán cargados todos los datos de las distribuidoras provinciales en esta herramienta que ya queda establecida para ésta y las próximas gestiones bonaerenses. Las voces consultadas pusieron énfasis en la unificación de datos de un lado y del otro, evitando disputas entre planillas de Excel con números distintos. El dato será uno. Aunque no descartan futuras diferencias de interpretaciones.
Fuente: Letra P.