El precio mayorista de los combustibles supera la inestabilidad y recupera los valores históricos
En el último año, las fluctuaciones de los importes a granel de los combustibles no cesaron. El derrumbe del crudo a principios de 2020, se sumó a la pandemia mundial, lo que dejó como resultado un combo inédito que afectó a la venta directa y a las estaciones de servicio blancas.
Desde septiembre del año pasado, los cambios de los valores de venta a al mayoreo de naftas y gasoil, tuvieron comportamientos independientes respecto de los precios al surtidor, que habían sido congelados por orden presidencial.
En este contexto, la curva del sector mayorista pasó de quedar ubicada hasta en un 20 por ciento por encima del precio al público, para llegar el día de ayer a rebajas técnicas de algunas compañías, que finalmente dejaron la brecha en los niveles históricos que por lo general siempre se manejaron, en alrededor de un 5 por ciento más barato que el minorista.
Mientras el dólar sigue subiendo y el barril criollo estipulado en el Decreto 488/20, quedó desenganchado por varios días, luego de que el crudo de Brent recuperase terreno tras los sucesos de marzo y abril, se conocieron las intenciones del ex gobernador de Neuquén, Jorge Sapag, que incentivó públicamente la idea de elevar el precio local de la producción a 50 dólares el barril.
Paralelamente a ello, el CEO de YPF, Sergio Affronti deslizó en un video interno dirigido a sus empleados, que para el mes de diciembre buscarán actualizar nuevamente los valores minoristas con el objeto de permitirle a la compañía recuperar la sustentabilidad.
“Hay sobrante de naftas y gasoil, que las petroleras tienen acumulados por efectos de la escasa demanda por parte de la cadena de comercialización y un sector agropecuario que llegó al final de la temporada de cosecha gruesa”, dijo a surtidores.com.ar, el presidente del Grupo Petroenergía, Mauro Lapacó.
Según la experiencia del empresario, los vaivenes, se deben a varios factores pero principalmente a la carrera por la baja que sufriera en los últimos tiempos el mercado argentino, donde las compañías prefirieron vender al mercado interno, en lugar de exportar, porque les era más rentable.
“En este contexto, vimos cómo YPF vendió al exterior a un precio de 5 dólares y luego rechazó varias propuestas de 2 y 3 dólares”, comentó y agregó que “ahora hay sobrestock, que debe ser solucionado por la productoras”, explicó.
Al respecto, recordó que “hace 10 meses, teníamos un precio mayorista casi 20 por ciento por encima de lo que se ofrecía en el surtidor al público minorista, pero con el exceso de producto, sumando a la devaluación permanente y la espera por la actualización del barril subsidiado, regresamos a un valor tradicional redondeando un 5 por ciento por debajo de las Estaciones de Servicio”, detalló.
Finalmente lamentó que “en muchas regiones del territorio argentino se volvió a fase 1 en el aislamiento social, con muchas provincias y ciudades cercadas, lo que trajo también, un freno a la rueda de venta mayorista que había comenzado a recuperarse”.
Fuente: Surtidores.com