“El shale de Estados Unidos ya no será una amenaza para la OPEP”
El CEO de la petrolera independiente Pioneer, Scott Sheffield, aseguró que el grupo de países exportadores no tendrá tanta competencia como hasta 2019. Estimó una fuerte recuperación de la demanda en corto plazo.
El incremento acelerado en la producción de petróleo no convencional en Estados Unidos que se mantuvo hasta diciembre de 2019, le permitió al país del norte alcanzar los casi 13 millones de barriles por día. Hasta ese momento la OPEP sabía que cualquier recorte de producción que hacía podía ser aprovechado por la competencia y perdería clientes.
La pandemia del coronavirus afectó fuertemente a la industria y cambió el mercado de manera sustancial. Ante este escenario es que, Scott Sheffield, CEO de Pioneer Natural Resources, una petrolera independiente con activos en Permian aseguró: “El shale de Estados Unidos ya no será una amenaza para la OPEP y la OPEP +”.
Sin embargo, el empresario es optimista con la recuperación de la demanda mundial de petróleo y remarcó que una vez que se logre inmunizar a un gran porcentaje de la población, de la mano de los viajes aéreos y del movimiento vehicular se verá un repunte en el consumo de crudo.
Cuando coronavirus comenzó a propagarse el año pasado por todo el mundo las extracciones de Estados Unidos cayeron en mayo a 10 millones de barriles por día. Actualmente la producción se ubica por encima de los 11 millones de barriles y las expectativas de alcanzar los 13 millones diarios nuevamente se ubican para el 2022 ó 2023.
“Estoy seguro de que podemos asumir que los barriles iraníes entrarán en el mercado con el tiempo y ahí el shale estadounidense ya no será significará una competencia para el cartel”, agregó Sheffield.
Los casi 2 millones de barriles que eliminó el Covid-19 no se espera que vuelvan en el corto plazo debido al estrés financiero que la industria de ese país sufrió durante los últimos años. Los inversores exigen un menor crecimiento de la producción y más retornos en efectivo, incluso cuando los precios del petróleo suben.
En el caso de Pioneer, la firma decidió limitar el crecimiento de la producción a 5% anual a largo plazo y planea devolver tres cuartas partes de su flujo de caja libra a sus accionistas en lugar de reinvertir en nuevos pozos.
Fuente: Río Negro.