El Tramo II del Gasoducto Néstor Kirchner y Reversión del Norte
Con estas obras se llegará con gas de Vaca Muerta a 6 millones de usuarios del Norte argentino. También se abren las puertas para exportar a Brasil. Los costos y el financiamiento.
La próxima semana el Gobierno nacional llamará a licitación las obras de reversión del Gasoducto del Norte y un mes después realizará la convocatoria para la construcción del segundo tramo del Gasoducto Néstor Kirchner (GPNK). Las dos iniciativas podrían estar terminadas en 2024.
Según fuentes oficiales, la Reversión del Norte permitiría a 6 millones de usuarios de las provincias de esa parte del país acceder al gas de Vaca Muerta. Según estimaciones de la Secretaría de Energía en base a certificaciones técnicas y niveles de consumo actuales, esta iniciativa podrá suministrar gas para uso doméstico durante 100 años.
El proyecto contempla la construcción de un tramo de 150 km entre La Carlota y Tío Pujio que discurrirá casi paralelo a la Ruta Provincial 4 para conectar el Gasoducto Central Norte (TGS) desde Cuenca Neuquina y el Gasoducto del Norte (TGN), que se extiende desde Campo Durán en Salta, justo en la frontera con Bolivia, con la genuina localidad de General Pacheco. El costo estimado ronda los US$800 millones, de los cuales US$500 millones serán pagados a la CAF. Por otro lado, el Tesoro realizará las restantes aportaciones privadas o las buscará.
La Reversión abre las puertas a la exportación de gas a Brasil vía Bolivia, que Flavia Royón venía discutiendo desde hace días con Armin Dorgathen Tapia, titular de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). Aún queda «letra chica» por resolver. Luis Arce, el presidente de Bolivia, quiere que esto se defina como una batalla regional. Algunos inversionistas y productores ya dan señales de ansiedad: «Se va a licitar, pero no sabemos quién va a comprar el gas».
Como resultado, el segundo tramo de 450 km del GPNK conectará la comunidad bonaerense de Salliqueló con San Jerónimo en Santa Fe, lo que le permitirá abastecer a las industrias y viviendas del Litoral, así como enviar gas a Brasil en el futuro, pero a través de Uruguay. Aún será necesario que Lula da Silva impulse la construcción de otro caño de 650 km donde también están interesadas en participar constructoras argentinas.
La apertura de esta nueva válvula internacional puede resultar en una alta demanda de «energía barata» de la zona industrial del sur de Brasil, por lo que se estudia sumar moléculas del yacimiento Palermo Aike santacruz, equivalente al 30% de Vaca Muerta, y el Mar del Plata offshore ya están en marcha. El costo del GPNK Tram II se estimó en US$1.900 millones y los chinos ya expresaron su deseo de financiarlo. En el lado brasileño del Tramo III se gastarán poco más de US$1.200 millones.