Final de la historia: La CSJN respaldó a Chevrón
Cuando Rafael Correa era presidente de Ecuador, realizó una profunda ofensiva contra Chevron por supuesta contaminación en su país, y hubo un capítulo importante del caso en la Argentina, donde los demandantes querían cobrarse un resarcimiento que le reclamaban a Chevron, quien estaba firmando con Cristina Fernández de Kirchner una inversión en Vaca Muerta. Bueno, recién en 2020 hubo un fallo de la Corte Suprema argentina, y es favorable a Chevron.
La Corte Suprema de Justicia de la Nación rechazó por unanimidad el reclamo de los demandantes para hacer cumplir una sentencia ecuatoriana por US$ 9.500 millones contra Chevron Corporation.
Obtenido el fallo en el Ecuador de Rafael Correa, los demandantes salieron al mundo a intentar ejecutar la sentencia, ambicionando el embargo y subasta de bienes de Chevron.
Es la más reciente de las victorias judiciales de Chevron contra el juicio iniciado en Ecuador, que los tribunales estadounidenses consideran que fue un fraude, soborno y corrupción, y que ningún tribunal arbitral internacional puede hacer cumplir como una cuestión de Derecho Internacional.
El 30/07, en una decisión unánime de 5-0, la Corte Suprema desestimó la apelación de los demandantes de la decisión de la Cámara de Apelaciones del 03/07/2018, que confirmó la opinión del tribunal de 1ra. instancia, desestimando a los demandantes ecuatorianos por falta de jurisdicción.
Con la decisión de la Corte Suprema, el periplo de los demandantes ecuatorianos llegó a su final. Las decisiones de los tribunales en USA, Brasil, Canadá, Gibraltar, La Haya y ahora Argentina, confirman el rechazo de la sentencia ecuatoriana.
Incluso, ya sin Correa en el poder, Ecuador admitió en una presentación pública que la sentencia emitida por sus tribunales contra Chevron fue «fraudulenta».
En julio de 2019, la Corte Suprema de Canadá se negó a revisar una opinión de un tribunal inferior desestimando la acción contra la subsidiaria indirecta de Chevron en Canadá.
En noviembre de 2017, el Supremo Tribunal Federal de Brasil desestimó la acción de ejecución presentada en ese país. Los fiscales, tanto en Brasil como en Argentina, habían opinado anteriormente que el juicio ecuatoriano era inaplicable.
El procedimiento clave restante es el arbitraje de Chevron contra la República del Ecuador ante el tribunal internacional en La Haya. El arbitraje se encuentra en la fase de análisis de los daños, y Chevron intenta un resarcimiento para recuperarse de los costos que sufrió para defenderse de las acciones en su contra.
En una decisión unánime en 2018, el tribunal de La Haya, incluido el árbitro elegido por Ecuador, sostuvo que la sentencia dictada contra Chevron en Ecuador en 2011 fue consecuencia de fraude, incluido el soborno judicial, el chantaje y la extorsión.
En 2014, el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos para el Distrito Sur de Nueva York determinó que Steven Donziger y su equipo compraron la sentencia ecuatoriana contra Chevron para intentar ejecutarla.
En 2018 Donziger fue suspendido de la práctica legal por su mala conducta en el litigio en Ecuador.
En mayo de 2019, Donziger fue acusado de desacato civil.
En julio de 2019, Donziger fue acusado de desacato criminal debido a su continua negativa a cumplir con las órdenes judiciales.
Donziger no es el único abogado de los demandantes ecuatorianos implicado en lo que The Wall Street Journal ha llamado el «fraude legal del siglo».
El abogado ecuatoriano Pablo Fajardo fue condenado junto a Donziger por los tribunales estadounidenses y el tribunal arbitral de La Haya, que concluyó que ambos «participaron en una conducta maligna prolongada hacia el sistema legal [del Ecuador] en general y, en particular, el Tribunal de Lago Agrio».
En mayo de 2018, la Corte Suprema de Gibraltar emitió una sentencia contra Fajardo por intentar hacer cumplir la sentencia ecuatoriana, otorgando US$ 38 millones en daños a Chevron.
Fuente: Urgente 24.