La energía, un área clave en serios problemas en el gobierno de Alberto Fernández
El gobierno de Alberto Fernández se encamina a cumplir un año. El que viene es un año electoral y ya se sabe que perder la elección de medio término equivale a recibirse de “pato rengo”.
El 19 de marzo la pandemia del coronavirus le dio al Presidente una oportunidad histórica: ser el centro de la escena y al mismo tiempo el “comandante de una gesta por la vida” y el único comunicador de los supuestos logros en esa lucha. Las encuestas lo catapultaron al primer plano. Parecía otra Argentina. La fantasía: pueblo y gobierno unidos para derrotar un enemigo letal que causaba estrago en el mundo entero.
El tiempo, la estadística de infectados y de muertos durante la cuarentena trae a nosotros la realidad pura y dura. La pregunta del momento es: ¿Qué hizo el presidente Fernández en su primer año de gobierno?; y por supuesto ¿Cómo hizo lo que hizo?
En este contexto me propongo analizar lo hecho en el sector energético durante la presidencia de Alberto. Se trata como todos sabemos un sector clave.
LA ENERGIA EN 2020
La primera característica de este período es que no hubo en 10 meses de Gobierno discursos importantes del Presidente, ni medidas concretas, ni planes ni políticas públicas prolijamente enunciadas. Lo segundo es que hubo dos Secretarios del área, el primero despedido a los 8 meses sin que se le conozcan dictámenes o resoluciones relevantes en su paso por un área de Gobierno que dicta unas 800 resoluciones por año. El segundo Secretario recién asumió 60 días después de haber despedido al primero.
En concreto la política energética del presidente Alberto Fernández aplicada hasta ahora solo puede ser analizada a través de las medidas concretas de ese período, veamos:
1.- El Gobierno envió al Congreso y logró la sanción de la ley Emergencia Pública N° 27561 en diciembre de 2019, que en su art 6° determina la intervención de los Entes Reguladores – ENARGAS y ENRE-
2.- En mayo de 2020 implementó – en plena cuarentena- la política de fijación de precios internos del crudo conocida como BARRIL CRIOLLO, que fijó precios del petróleo en niveles muy superiores a los del mercado internacional.
3.- En octubre el Presidente anunció con su gabinete el Plan Gas 4 por el cual se fijarán, mediante mecanismos de dudosa competencia, precios del gas natural con fuertes subsidios a los productores que serán superiores a los precios del mercado internacional.
4.- El Presidente Fernández anunció el traslado la sede de la Secretaría de Energía a la provincia del Neuquén (octubre)
5.- Asignación del 25% dentro del Impuesto a la Riqueza para apoyo financiero a YPF para proyectos de Exploración, Desarrollo y Explotación de Yacimientos de Hidrocarburos.
6.- Altos funcionarios del área han anunciado en forma extraoficial que el año próximo se producirán cortes del suministro eléctrico en verano, y grandes importaciones de gas natural en invierno. Esos anuncios no están apoyados en estudios concretos ni en pronósticos confiables.
7.- El Gobierno ha omitido definir criterios en materia de cantidad y precio sobre la importación de gas de Bolivia para el período comprendido entre 2021 y la finalización del contrato en 2026, lo que deja a dicho contrato en un verdadero limbo.
EL ANALISIS DE LA POLITICA
Un análisis de las principales medidas, del contexto en el cual las mismas fueron adoptadas y de elencos de funcionarios que las implementaron permite afirmar que: a) no forman parte de una plataforma programática previa; b) estamos en presencia de un equipo ensamblado con división de roles pero sin experiencia probada; c) no existe Planificación Energética; d) el equipo energético oficial carece un interlocutor confiable con la sociedad en general y con la cadena productiva en particular.
En este contexto formulo estos breves comentarios sobre lo actuado:
Sobre el traslado de la Secretaria de Energía a Neuquén
Muy desacertada medida, inconducente y demagógica, destinada a mostrar un falso concepto de federalismo por parte del Presidente. Deja en claro que Alberto Fernández sigue la equivocada idea de que toda la Energía argentina pasa exclusivamente por el “meridiano de Vaca Muerta”; concepto erróneo que se ha aplicado con continuidad e intensidad en nuestro país entre 2010 y 2020. Este error minimizará la importancia energética de otras regiones del país y generará un brutal desorden administrativo. La Secretaría de Energía debe estar en la Capital Federal de la República, entre otras razones elementales porque es la sede del Poder Ejecutivo Nacional y espacio lógico de interactuación con el conjunto de la administración del Estado.
El gobernante prudente no debe pensar solo en la próxima elección sino en las próximas generaciones y las nuevas energías dentro de un inexorable proceso de Transición Energética.
Sobre las intervenciones a los Entes Reguladores y la Emergencia Energética
Los interventores designados en el ENRE y en ENARGAS en 2019 no han dado cumplimiento al proceso de Renegociación de la Revisión Tarifaria integral realizada en 2016 y 2017; ni tampoco realizaron una revisión de carácter extraordinario en 180 días (plazo vencido en junio de 2020) como lo estableció el articulo 5 ° de la ley 27561.
Los plazos están vencidos y estamos a escasos dos meses de la finalización del plazo de un año de ambas intervenciones fijado en la ley que vence en diciembre de 2020. El atraso en dar cumplimiento a estos mandatos de la ley hace peligrar la prestación de servicios públicos esenciales.
Sobre el Barril Criollo y el Plan Gas 4
Estas políticas han sido impulsadas por intereses corporativos -públicos, privados, políticos y gremiales- ligados a la producción de hidrocarburos que en forma coordinada presionan y convencen a los débiles gobiernos de turno de distinto signo ideológico para fijar precios no competitivos en perjuicio del consumidor en el primer caso y del erario público en el segundo caso.
La política del barril criollo constituyó un fracaso total del gobierno que no fue imitado por ningún gobierno del mundo.
El Plan Gas 4 anunciado por el Presidente en Neuquén, aun en curso de implementación, tendrá un fuerte impacto en el déficit presupuestario y encubre un muy fuerte aumento de tarifas a los consumidores cuya responsabilidad caerá inexorablemente sobre el Gobierno y el partido gobernante.
Los anuncios de la Secretaria de Energía sobre importaciones crecientes de gas natural y cortes de Energía Eléctrica
Los anuncios sobre cortes de energía eléctrica en verano y de mayores importaciones de gas en invierno realizados por canales de prensa por altos funcionarios en ejercicio del área energética deben ser descartados por no estar fundados en pronósticos de demanda realizados con las reglas de la buena técnica. Son confusos y solo buscan crear las condiciones para aumentos de precios y tarifas que pueden llegar a afectar a los que menos tienen en beneficio de los que más tienen.
La no renegociación del Contrato con Bolivia
Se trata de una omisión inadmisible del Gobierno en razón de la alta participación de este suministro de gas natural en el total del consumo nacional.
Fuente: Visión Federal.