El proyecto anunciado por el ministro Sergio Massa, implicaría la eliminación de impuestos a algunos insumos importados y la baja de retenciones para las exportaciones incrementales. La posición de los gobernadores electos Claudio Vidal e Ignacio Torres.

El Gobierno nacional remitió al Congreso el viernes pasado el proyecto de ley para la creación de un régimen de incentivos, por los próximos 10 años, a la inversión para la producción de gas y petróleo en yacimientos convencionales, una medida clave para regiones como la cuenca del Golfo San Jorge.

El mismo, apunta a revertir el declino natural que vienen registrando las cuencas maduras en la última década. Tiene como objetivo impulsar la inversión en reservorios convencionales en todo el territorio nacional, con el fin de mantener e incrementar la actividad y el empleo en el sector y aumentar la producción de hidrocarburos líquidos en áreas maduras o con bajos niveles de productividad.

La medida había sido anunciada por el ministro de Economía Sergio Massa semanas atrás, algo que confirmó en la entrevista con el Grupo La Opinión Austral. El objetivo es bajar impuestos para fomentar la inversión en cuencas hidrocarburíferas maduras como las de la Patagonia, del Golfo San Jorge, del Norte Argentino y la de Mendoza, que “tengan la oportunidad de aumentar sus niveles de inversión y mejorar sus niveles de producción sobre la base de una reducción de impuestos“, como señaló Massa.

Qué se busca

El proyecto de ley tiene incentivos fiscales y tributarios, con un principal objetivo: “Obtener producción incremental de petróleo crudo en áreas maduras y con pozos de media o baja productividad, o previamente inactivos o cerrados, por métodos tradicionales, con aplicación de nuevas tecnologías o mediante sistemas o mecanismos móviles de extracción y transporte, autorizados por la Autoridad de Aplicación, en los términos que establezca la reglamentación”.

Según el mensaje que acompaña el proyecto de ley se busca atender “la situación específica de diversas áreas hidrocarburíferas “que han visto reducido sostenidamente su nivel de actividad no sólo por motivos económicos de los operadores y del entramado productivo prestatario de bienes y servicios, sino también por cuestiones técnicas e incluso geológicas“.

El proyecto consta de 14 artículos que establecen, como prioritarios, el nuevo régimen por un plazo de 10 años, donde se definen los sujetos alcanzados y la forma de acceder a los beneficios promovidos.

También se dispone que los titulares del proyecto de inversión autorizado podrán comercializar libremente en el mercado externo el 50% de la producción incremental de hidrocarburos líquidos obtenidos como consecuencia de las inversiones promovidas, quedando alcanzadas con una alícuota del Derecho de Exportación de 0%.

El proyecto también contempla que los titulares de los proyectos de inversión autorizados, como así también quienes sean contratados por ellos, podrán gozar del beneficio de amortización acelerada de los bienes de uso afectados a las actividades en el Impuesto a las Ganancias y la acreditación o devolución del IVA.

Entre algunos puntos destacados de los beneficios fiscales para aumentar la producción en estas áreas, se encuentran los siguientes:

Posibilidad de unificación de distintas áreas como una única concesión de explotación de hidrocarburos con la autorización del poder concedente.

Libre comercialización en el mercado externo de una parte de la producción incremental de hidrocarburos líquidos, y beneficios en materia de derechos de exportación. Así, el 50% de la exportación incremental no tendrá retenciones.

Eliminación de la alícuota de importación de determinados polímeros.

Beneficios Fiscales en relación al Impuesto a las ganancias y a la devolución del IVA.

Chubut y Santa Cruz

El proyecto de ley incumbe directamente al Golfo San Jorge, una de las cuencas maduras más importantes de la Argentina. El límite geográfico está compuesto por las provincias de Santa Cruz y Chubut, que a partir del 10 de diciembre contará con una sintonía política entre ambos gobernadores electos: Claudio Vidal (Ser Santa Cruz) e Ignacio “Nacho“ Torres (Juntos por el Cambio).

Poco después de imponerse en las elecciones de agosto, consultado por los cambios de color político tanto en Santa Cruz como en la provincia de Chubut, donde Ignacio “Nacho“ Torres de Juntos por el Cambio ganó la elección al oficialismo, Vidal había afirmado que con el gobernador electo de chubutense tienen un “apoyo político” mutuo.

“Nos llevamos muy bien. Tenemos ideas parecidas. Planteamos algo innovador para las provincias“, dijo Claudio Vidal sobre Torres. “Lo importante es fortalecer la gestión, a partir del 10 de diciembre, y fortalecernos a nivel Patagonia también“, añadió sobre el acercamiento con el chubutense. “En la Patagonia, Chubut y Santa Cruz siempre fueron provincias que aportaron mucho al Estado nacional. Basta de que Nación haga lo que quiera con nuestros recursos“, remarcó.

Para ambos mandatarios electos, según vienen expresando en sendas entrevistas a los medios, recuperar la producción en ambas provincias en fundamental para incrementar las estrechas arcas públicas. Y obviamente que el recurso hidrocraburífero, tanto el convencional como el no convencional, son fundamentales en la búsqueda de ese objetivo.

“Voy a trabajar con el gobernador que eligieron los santacruceños“, había dicho Sergio Massa a La Opinión Austral, algo que llevó al aún diputado nacional Claudio Vidal a responder: “Es alentador“. Sin embargo, se encargó de aclarar: “A mí me gustaría un proyecto firme, muy preciso de lo que quieren hacer con Santa Cruz, con sus recursos, qué es lo que quieren hacer con la Patagonia“, expresó en esa oportunidad.

Fuente: La Opinión Austral