La minería del litio se duplicó en este año
La minera canadiense de litio Lithium Americas Corp. ha doblado su precio en lo que va del año. ¿Tiene futuro el litio? ¿Para qué se utiliza? Lo cuenta en esta columna de Carta Financiera el economista Miguel Boggiano.
Lithium Americas Corp. (LAC) se centra en el desarrollo de dos proyectos de litio:
Cauchari-Olaroz: situado en Argentina, provincia de Jujuy, dentro de una zona denominada «Triángulo del Litio» (una compartida por Argentina, Bolivia y Chile), donde están concentradas más del 75% de las reservas mundiales de litio. Es un proyecto de mineral de salmuera de litio y posee una vida útil de 40 años.
Thacker Pass Nevada: se encuentra en el noroeste de Nevada y es la principal reserva de litio de Estados Unidos. Es un proyecto de litio a base de arcilla esmectita y tiene una vida útil de 46 años.
Su planta, situada en Nevada, está construida para fabricar productos especiales de arcilla orgánica, derivados de la hectorita y otras arcillas. Estos productos son utilizados por la industria del petróleo y el gas como aditivos viscosos especiales para los fluidos de perforación y en otros sectores.
Usos del Litio
El litio es un metal alcalino blando de muy baja densidad. Tiene la particularidad de ser el elemento químico sólido más ligero y es muy reactivo, reaccionando fuertemente al fuego.
Al ser un buen conductor de calor, se ha convertido en un elemento muy importante dentro de la producción de baterías, ya sea de celulares, automóviles, y otros. Para que tengan de referencia, un iPhone tiene algunos gramos de litio, mientras que el Tesla Model S utiliza varios kilos.
Tiene gran protagonismo en la industria de autos eléctricos que explican la incipiente demanda. Este mercado está creciendo en demasía y se espera que se acelere su adopción.
Los precios del litio se han duplicado en el último año, según un índice de Benchmark Mineral Intelligence de carbonato e hidróxido de litio.
Cabe destacar que el litio, a diferencia de otros metales, no se comercializa en bolsas internacionales, por lo que su precio deriva de negociaciones privadas.
Fuente: Miguel Boggiano para Memo