Lapeña: «Argentina ha dejado de explorar desde hace 30 años»
El presidente del Instituto Mosconi, Jorge Lapeña, brindó su opinión sobre los rendimientos de los yacimientos y la falta de exploración.
En una extensa charla con +e, Jorge Lapeña, exsecretario de Energía y presidente del Instituto Mosconi, compartió su visión de cómo llega el sector al fin del mandato de Alberto Fernández y Cristina Kirchner, cuáles son los interrogantes en relación a la gestión de Javier MIlei y al presente de la explotación en el país.
“Tenemos un problema porque Argentina ha dejado de explorar desde hace 30 años, desde el gobierno de (Carlos) Menem (…) En contraposición tenemos las áreas de Vaca Muerta, donde el no convencional ha sido un éxito y hoy Neuquén es prácticamente la provincia más importante en producción de petróleo y de gas no convencional”, dijo.
¿Cómo llega el sector al fin de la gestión de los Fernández?
El sector tiene problemas no resueltos de mucha magnitud, que van a formar parte, supongo, de la agenda del gobierno que viene. Todavía como no hay una expresión programática concreta por parte del presidente electo, lo digo porque la plataforma de energía o de política energética de La Libertad Avanza (LLA) es muy elemental. Tiene un nivel realmente bajísimo, habla de una asignatura pendiente, no hay nada escrito que pueda considerarse o asimilarse como una plataforma de gobierno. Estos vacíos se irán llenando con el paso del tiempo. Por lo pronto, creo que LLA no tiene programa energético explícito y vamos a ver cómo transcurren las primeras semanas.
¿Cuáles cree que deberían ser los principales temas que encare la gestión de Milei para el sector?
En primer lugar, esperamos una definición del presidente electo en relación a que se ha definido a sí mismo en los debates presidenciales como un negador del cambio climático. Es decir, es un negacionista del cambio climático. Por lo tanto, no es esperable que un negacionista tenga un plan que vaya a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, porque precisamente no cree que este calentamiento global sea consecuencia de la acción humana o que tenga causas antropogénicas, para decirlo de alguna forma.
Entonces, me parece que esto es lo primero que yo esperaría del presidente electo: que diga si cree o no cree que es necesario implementar una política de transición energética, la cual tiene que estar acordada con los países en cumplimiento de lo establecido en el Acuerdo de París. Eso es lo primero que puedo decir.
¿Qué otros temas le parecen fundamentales para que se definan?
El presidente tiene que tener un diagnóstico que supongo que se lo hará su propio equipo. Nosotros sabemos que es un sistema que está falto de inversiones, tenemos un sector eléctrico que fundamentalmente tiene como actor principal a las centrales termoeléctricas y es un parque térmico que tiene un grado de obsolescencia y de falta de mantenimiento muy grande.
La experiencia del año pasado indica que en los días de calor, donde la demanda se hace máxima -cosa que puede ocurrir en diciembre o en enero-, el sistema se pone en una condición absolutamente crítica y se ha llegado al corte de suministro.
Entonces, me parece que es un tema que debería formar parte de las preocupaciones principales de la nueva administración energética, al igual que ir resolviendo los déficit de inversión que hay por ejemplo en el parque eléctrico, en el sistema de transmisión de muy alta tensión de la Argentina, que sabemos que están saturadas en su capacidad de transporte y con inversiones muy atrasadas.
Tenemos otros temas pendientes donde este gobierno que se va no ha resuelto qué actitud van a tomar sobre el vencimiento de las concesiones hidroeléctricas, que fueron otorgadas por el Gobierno Nacional de 1993 por un plazo de 30 años y han comenzado a vencer en el año 23.
La resolución de este tema está postergado, o sea los contratos establecen que estas centrales deben volver al procedente, que sería el Estado nacional, que es quien las construyó.
El gobierno de saliente, del presidente Fernández ha perdido el tiempo porque él lo sabía y tenía los equipos armados como para que le informaran, ya en el año 2020 se sabía que se iba a ocurrir. Sin embargo, pasó el tiempo, no se tomó ninguna decisión y ahora se está manejando con el contrato vencido y se seguirá así hasta poder adoptar una política definitiva.
¿Cómo ve el futuro del no convencional? ¿Y el convencional?
Tenemos un problema porque Argentina ha dejado de explorar desde hace 30 años, desde el gobierno de (Carlos) Menem. Me refiero a explorar en búsqueda de nuevos yacimientos. No lo ha hecho ni en el mar, donde la plataforma es inmensa y no se ha explorado. Es de más de un millón de kilómetros cuadrados en el Atlántico Sur, de la cual Argentina tiene el derecho de explorar, de descubrir y de poner producción yacimientos que pueden ser muy importantes en estos marinos importantes, y acá no se ha hecho prácticamente nada.
En esa decisión se ha hecho perder cinco lustros y tampoco las provincias, que son las titulares de recursos, tampoco han hecho nada en áreas convencionales. Consecuentemente con esto, todas las cuentas convencionales argentinas, están en reducción productiva y caída productiva crónica.
Si me pregunta por qué, la respuesta es porque los yacimientos son cada vez más viejos, están más explotados, los rendimientos son decrecientes y como no hay nuevo descubrimiento de nuevos yacimientos que reemplacen a los antiguos, evidentemente estamos en una situación de decaimiento productivo.
En contraposición tenemos las áreas de Vaca Muerta, donde el no convencional ha sido un éxito y hoy Neuquén es prácticamente la provincia más importante en producción de petróleo y de gas no convencional. Neuquén ha superado a la cuenca del Golfo de San Jorge, que es la que históricamente fue la principal de la Argentina y donde se descubrió el petróleo en 1907.
¿Cree que estarán las condiciones para que avance la producción offshore? ¿Es viable?
Lo veo viable y conveniente. Argentina tiene un mar a disposición para explorar, producir, exportar excedentes y para abastecer su propio mercado. Me parece realmente una picardía que no aproveche esa oportunidad.
¿Es optimista?
Para ser optimista tendría que conocer el plan del Sr. Milei y por ahora no lo conozco. Solo sé que se autodefine como negacionista del cambio climático. Lo primero que tendría que ver es el discurso de apertura en el Congreso y a ver qué dice de sus cuatro años de gobierno en materia de producción de petróleo, de gas, de construcción de nueva infraestructura de transporte eléctrico, de gasoductos… Yo no sé, pero él ha dicho que se va a suspender toda la obra pública. Es una frase, pero si lo hace, yo creo que las privadas en este momento no tienen los incentivos para afrontar los riesgos que implica una economía argentina (totalmente desequilibrada).
No hay una vocación inversora por parte de los actores económicos privados y si él cierra la puerta de la inversión pública como ha afirmado en algún discurso que he escuchado, creo que a lo mejor se encuentra ante una puerta sin salida. Pero en la campaña se dicen cosas y por eso esperaría al 10 de diciembre. Hay incógnitas muy grandes.
Fuente: LMNeuquén