Las obras de los otros gasoductos en la Argentina
Chubut espera una señal de Nación para la unión de los gasoductos Cordillerano y San Martín. Tierra del Fuego trabaja en el interconectado del San Martín y el Fueguino.
El gasoducto Néstor Kirchner estuvo en el centro de la escena con la investigación por presuntas irregularidades en el proceso de licitación. Finalmente, el juez federal Daniel Rafecas decidió cerrar la causa al considerar que la obra “se viene realizando conforme a las normas”. En paralelo, el país cuenta con otros gasoductos que están en obra o que buscan financiamiento para que los yacimientos puedan aumentar su capacidad.
El ejemplo más particular es Tierra del Fuego. La provincia gobernada por Gustavo Melella estima culminar la unión de los gasoductos Fueguino y San Martín antes de fin de año, lo que significaría la obra más importante para el transporte de hidrocarburos desde la Cuenca Austral hacia el resto del país.
El gasoducto Fueguino abastece a las tres ciudades más grandes de Tierra del Fuego: Ushuaia, Río Grande y Tolhuin, es concesionado por Camuzzi Gas del Sur y nace al sur de la Bahía San Sebastián en cercanías de la planta de tratamiento de gas que tiene YPF. Su estructura permite incorporar todas las explotaciones de gas que hay en territorio onshore de Tierra del Fuego.
A unos 800 metros de distancia, nace el gasoducto San Martín, que cruza el Estrecho de Magallanes y llega hasta Bahía Blanca. Este ducto está concesionado por TGS. Los dos gasoductos están separados físicamente y se tuvieron que hacer diferentes trabajos para completar la obra. Es que el San Martín tiene una pequeña presión por encima del Fueguino.
“Hasta el año 2014, ninguna molécula del gasoducto San Martín ingresaba al gasoducto Fueguino. Los ciudadanos fueguinos no consumían el gas que se inyectaba desde el gasoducto San Martín, pero hubo una declinación en Tierra del Fuego y comenzamos a incorporar gas que se llama ‘de retroceso’. El proceso fue paulatino y hoy casi el 55% del gas que consumen las ciudades de Tierra del Fuego viene del gasoducto San Martín por retroceso”, destacó Alejandro Aguirre, secretario de Hidrocarburos de Tierra del Fuego.
La obra de interconexión se realizará a 80 kilómetros de Río Grande e implicará la construcción de una planta compresora que permitirá generar la presión necesaria para cubrir los barrios que hoy no tienen gas natural. Además, garantizará que se pueda llegar con una buena presión hasta Ushuaia.
El proyecto supera los 1000 millones de pesos. “En la gestión provincial anterior, esta obra se previó hacerla con fondos del fideicomiso austral pero no tuvo continuidad. Esta gestión decidió hacerlo con fondos públicos”, subrayó.
Chubut también busca realizar una obra de interconectado. El Gobierno del Chubut trabaja para que se lleve a cabo la unión de los gasoductos Cordillerano y San Martín, y se espera que la administración de Alberto Fernández brinde una señal para avanzar en el proyecto que permitirá aumentar un poco más su producción desde los yacimientos de Cerro Dragón y Cerro Hermoso.
“Se lo planteamos a Maggie Videla, subsecretaria de Hidrocarburos de Nación, y nos dijo que iba a averiguar si en algún momento se había hecho algún proyecto referido a este tema”, consideró Martín Cerdá, ministro de Hidrocarburos de Chubut, en diálogo con +e.
La respuesta desde Nación podría llegar en los próximos días, pero en el caso de que no exista un antecedente, se avanzaría en crear el proyecto desde cero. “La idea es que le expliquemos los detalles más técnicos porque vamos a tener que empezar a armar un proyecto, presentarlo formalmente en la Secretaría de Energía y, a partir de ahí, empezará el trámite para ver si se puede realizar o no”, destacó el funcionario chubutense.
Chubut busca colaboración de Nación para avanzar con una obra que permitiría aumentar la producción de gas de la Cuenca del Golfo San Jorge. “La gran parte del gas que se produce en Cerro Dragón se inyecta en el Cordillerano y se lleva para toda la Cordillera, y la producción de los yacimientos de YPF se inyecta en el San Martín. Ese bypass permitiría que se pueda inyectar más gas al San Martín y alivianar lo que hoy se está cargando en el Cordillerano”, subrayó, y aseveró que “sería algo estratégico que puede beneficiar a nuestra cuenca y a la cordillera”.
En este sentido, Cerdá manifestó que el proyecto de interconexión significaría anticiparse a algunos inconvenientes que pueden aparecer en la región. “Si hoy hay un tema operativo en Cerro Dragón o Cerro Hermoso, la Cordillera no se quedaría sin gas, pero estaríamos en problemas. Entonces, ese bypass se puede usar ante una emergencia”, aseguró.
Dejadas de lado: las obras que nunca se terminaron
En el país hay proyectos de gasoductos completamente abandonados: Noreste y De la Costa. El primero fue anunciado en 2004 y tenía pensado abastecer de gas boliviano a Salta, Chaco, Misiones, Corrientes, Formosa y el norte de Santa Fe.
Fue el primer proyecto de gran escala anunciado por el kirchnerismo, pero nunca se logró concretar pese a que se han invertido 2300 millones de dólares. Las válvulas están tiradas en el monte y en el 2020 se denunció a autoridades municipales por el robo de caños.
En tanto, el gasoducto De la Costa fue anunciado en el 2015 y pretendía proveer de gas a diferentes partes de la provincia de Buenos Aires: General Pueyrredón, Lezama, Partido de la Costa y Pinamar. El proyecto contó con una inversión de 544 millones de pesos. En el 2017 se anunció la ampliación de la obra con 373 millones de pesos. Solo falta completar un 15% del proyecto. En 2021, el gobierno de Alberto Fernández prometió terminarlo para resolver la falta de abastecimiento que tienen aproximadamente 84.500 usuarios.
Fuente: LMNeuquen