YPF tomó la delantera en las áreas de shale para evitar más importaciones en el 2021. Cómo es Rincón del Mangrullo, el yacimiento que ya tiene actividad.

El Plan Gas 4, o Plan Gas.Ar, como el gobierno nacional denominó al nuevo precio estímulo a la producción en el país, todavía no fue oficializado. Sin embargo, se conocen los aspectos centrales del decreto que tiene a la firma el presidente Alberto Fernández, tal como lo adelantó el domingo +e.
En ese contexto, YPF ya dio un primer paso y estableció una hoja de ruta para avanzar en la producción de gas, en una de las áreas donde espera apuntalar parte de la producción de shale gas en Vaca Muerta, sobre la ventana de gas y condensados de esa formación geológica.
La petrolera realizará 24 pozos entre lo que queda del año y finales del 2021 con este objetivo.

Rincón del Mangrullo es un bloque en el que la compañía nacionalizada ya hizo dos desarrollos no convencionales, uno de tight gas, en la formación Mulichinco y otro de shale gas, en Vaca Muerta.

Este yacimiento, lindante con un área insignia del shale gas argentino, Fortín de Piedra (Tecpetrol), no tenía actividad desde febrero del 2019.

El objetivo es que pueda alcanzar unos 5 millones de metros cúbicos diarios de producción (MMm3/d) en 2021, el momento para el que se espera que el nuevo esquema de precios garantice unos 70 MMm3/d diarios con todas las empresas que se sumen al nuevo plan promovido por el gobierno nacional.

YPF afirma que Rincón del Mangrullo generará un total de 600 puestos de trabajo en total vinculados al proceso de construcción de pozos, perforación, fractura y puesta en producción.

El plan de desarrollo integral, tal como lo informó meses atrás este medio, consiste en los próximos años en una campaña paulatina de perforación de 74 pozos, la construcción de 13 locaciones, 51 instalaciones de superficie y 85 ductos, además de 39 caminos y tres líneas eléctricas.

Esto, en la mejor hipótesis de desarrollo de mediano plazo del área, algo que requerirá las condiciones de precio y mercado que lo hagan viable.

De acá a finales de año, YPF piensa avanzar con cinco perforadores en otras dos áreas: La Ribera y Aguada de la Arena, los otros dos bloques con los que piensa apuntalar la producción de gas.

El motivo principal para este objetivo es la carrera contra la declinación de la producción en el país.

Argentina busca evitar ese mal mayor que sería tener que salir a comprar más gas en el exterior, lo que implicaría una presión adicional sobre el dólar, en momentos en que el país trata de encarrilar ese gran desafío que es su situación macroeconomía y el impacto en el día a día de millones de argentinos.

Fuente: Más Energía.