Mariana Juri afinó sintonía con el embajador Marc Stanley en una reunión con alto perfil político
La senadora nacional Mariana Juri (UCR) fue una de las que colaboró para que el embajador estadounidense Mark Stanley visitara Mendoza la semana pasada. Ahora, una nueva reunión con el diplomático confirmó el vínculo y el intento de acercar posiciones.
En julio, la senadora nacional Mariana Juri (UCR) fue una de las legisladoras que coordinó detalles para la visita a Mendoza del embajador de Estados Unidos, Mark Stanley. El vínculo se fortaleció desde entonces porque no sólo Stanley recorrió la provincia sino que un nuevo cónclave con la mendocina confirmó que habrá más proyectos en común.
«Participé de la reunión convocada por (el jefe de Gobierno porteño) Horacio Rodríguez Larreta (…) Recibimos al embajador y una delegación de senadores republicanos y demócratas de los Estados Unidos», expresó la senadora en su cuenta de Twitter.
En el encuentro también estaba, entre otros, el senador nacional por el radicalismo Martín Lousteau.
Stanley y la «confianza a largo plazo»
Según trascendió, el encuentro tuvo como eje el potencial económico de Argentina. «Coincidimos en que el país tiene una gran oportunidad pero debe generar confianza a largo plazo. Y este es nuestro compromiso. Las posibilidades de inversión ocuparon buena parte de la reunión», escribió Juri.
Como se sabe, en medio de la crisis energética que conlleva la guerra entre Rusia y Ucrania-OTAN, el interés de los estadounidenses y europeos por conseguir recursos de nuevas fuentes se ha consolidado.
No sólo en lo que respecta al petróleo -con Vaca Muerta como estrella-; sino también en relación a los materiales que utilizan las nuevas tecnologías y que están en territorio argentino, como el litio.
De ahí que pueda avizorarse una nueva etapa en la estrategia internacional de la potencia del norte. En el mismo sentido, Lousteau destacó: «Conversamos sobre la relación bilateral e intercambiamos miradas sobre cómo mejorarla desde ambos lados. Analizamos también los desafíos que tenemos por delante aprendiendo de la experiencia y los errores mutuos».
El intento de fortalecer alianzas en un nuevo contexto
Todo esto se produce, además, a pocos días de que China, la otra superpotencia en el primer plano global, celebrara el XX Congreso Nacional del Partido Comunista, donde se dejó en claro que los chinos no están dispuestos a ceder en el campo geoestratégico, a pesar de que en términos militares «clásicos» aún están lejos de los EE.UU.
Y es que el tercer mandato de Xi Jinping (69) estatá marcado por lo que desde el propio PC definen como una «severa y compleja situación internacional», que China intentará afrontar convirtiendo «al Ejército Popular en uno de primer orden mundial» debido a que se lo considera «una exigencia estratégica para la construcción integral de un país socialista moderno».
Frente a eso, es de esperar que EE.UU. salga a reforzar sus lazos con el resto de América. No es una cuestión de meras simpatías o proximidad cultural, sino un objetivo económico clave para las próximas décadas. Aunque, claro, China también lo sabe y prepara su propia jugada.
Fuente: Diario Uno