Más de 4 millones de personas sin electricidad en Texas por una histórica nevada
Por el clima extremo en el mencionado estado, hubo al menos 21 decesos y aproximadamente 2,7 millones de hogares seguían este jueves sin calefacción.
Una tormenta de invierno paralizó la red eléctrica de Texas y, pese a que se está alejando de la región, las temperaturas heladas aún permanecen y siguen dificultando los intentos del estado estadounidense por restablecer la energía para sus residentes.
Hasta este jueves por la mañana, cerca de unos 2,7 millones de hogares en Texas continuaban sin calefacción. Y las autoridades, por su parte, advirtieron sobre los peligros de un efecto dominó en la infraestructura.
Se espera que el clima extremo, que provocó el fallecimiento de al menos 21 personas y dejó sin electricidad a más de 4 millones de personas en Texas, permanezca hasta el fin de semana.
La falta de energía cortó el suministro de agua para millones de personas, tensó más la capacidad de los hospitales para tratar pacientes en medio de una pandemia y dejó aisladas a comunidades vulnerables con carreteras congeladas aún intransitables en algunas partes del estado.
«Esto es, en muchos sentidos, una catástrofe dentro de la catástrofe», advirtió Lina Hidalgo, máxima responsable electa del condado de Harris, que abarca Houston.
Los residentes de más de 100 condados de Texas recibieron la orden de hervir el agua para potabilizarla mientras las plantas de tratamiento siguen afectadas por cortes de energía, según precisaron las autoridades.
Más de 12 millones de personas en el estado -el segundo más grande del país con una población de aproximadamente 29 millones- no tienen agua potable en sus hogares o tienen agua potable disponible sólo intermitentemente.
Con las temperaturas heladas que se esperan hasta el fin de semana, volver a encender las luces será un proceso lento, ya que Texas perdió el 40% de su capacidad de generación, con pozos, tuberías de gas natural y turbinas eólicas congeladas.
Los hospitales de Houston, la mayor ciudad del estado, y de otros lugares de Texas informaron que no tienen agua. Una veintena de decesos se atribuyeron a la ola de frío. Sin embargo, las autoridades sospechan que hubo más muertes pero que los cuerpos no fueron aún.
LOS ENVÍOS DE PETRÓLEOS, PARALIZADOS
La ola de frío de Texas se extendió por sexto día el jueves y el mayor estado productor de petróleo de Estados Unidos sufría por extendidos apagones en refinerías, en tanto que los envíos de gas y petróleo quedaron paralizados hasta el punto de afectar los suministros en la frontera con México.
El hielo por las bajas temperaturas provocó el cierre de un quinto de la capacidad de refinación de Estados Unidos y suspendió las faenas de producción de crudo y gas natural en varias partes del estado.
Las fallas de energía en Texas también impactaron los suministros de electricidad en México, con las exportaciones de gas natural a través de un ducto paralizadas en un 75% el fin de semana pasado, según datos preliminares del programa Eikon de Refinitiv.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, ordenó a los proveedores de gas natural no enviar combustible fuera del estado y pidió a los reguladores locales que se ciñeran al plan. El operador de suministro eléctrico del estado, ERCOT, estaba intentando restaurar la energía, pero los generadores térmicos -que funcionan con gas natural, carbón y otros combustibles- perdieron capacidad de operar porque las válvulas y ductos se congelaron.
No estaba claro si Abbott o los reguladores podrán aplicar una prohibición sobre los cargamentos interestatales o que crucen la frontera. El pedido de Abbott a la Comisión de Autopistas de Texas, el regulador de petróleo y gas del estado, terminó por implicar asuntos políticos, de acuerdo con una fuente, vinculando a grupos que no tienen la autoridad para interferir en el comercio del área.
Texas exporta gas por ductos a México y mediante navíos que llevan gas natural licuado desde los terminales en Freeport y Corpus Christi. También suministra combustible a numerosas regiones del país, incluyendo el medioeste y el noreste de Estados Unidos.
Fuente: El Cronista.