El pronunciamiento, alcanzado luego de trabajosas negociaciones, fue reconocido por los países desarrollados, mientras que los del Tercer Mundo alertaron que no se ha conseguido «corregir el rumbo».

La COP28 sobre cambio climático en Dubái cerró ayer con un acuerdo histórico al mencionar la necesidad de una “transición” para dejar atrás los combustibles fósiles, principales causantes del calentamiento global, una medida que fue celebrada por los países desarrollados y cuestionada por insuficiente por algunos naciones en desarrollo.

Se trata de la primera ocasión de nombrar los combustibles fósiles en un texto final, poco más de 30 años desde la primera Conferencia de las Partes (COP) de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el cambio climático (CMNUCC).

Hasta ahora se ha hablado de la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), pero siempre se ha evitado mencionar los hidrocarburos, que representan el 80% de las emisiones de gases de efecto invernadero y calientan el planeta.

El presidente de la COP28, Sultan Ahmed al Jaber, ministro de Industria emiratí, anunció que se trata de una decisión «histórica para acelerar la acción climática» ante el pleno de la COP28, que debía terminar el martes, pero se prolongó debido a la falta de acuerdo en torno al borrador presentado el lunes por la presidencia, que no conformaba a ninguna persona.

El borrador proponía dos opciones: «reducirlo» gradualmente o «eliminar progresivamente» el uso de energías fósiles, lo que fue rechazado por un grupo liderado por Arabia Saudita. Después de mucha deliberación, ayer se llegó a un acuerdo para iniciar una «transición» que dejará de utilizar combustibles fósiles para alcanzar la neutralidad de carbono (emitir la misma cantidad de carbono que se captura) en 2050.

Joe Biden, quien prometió que abordó la crisis climática desde el principio de su gobierno, insistió en que se puede transformar «la crisis en oportunidad» para generar nuevos empleos en el sector de la energía limpia y mejorar, a nivel global, «la calidad». de vida» de las personas a nivel global. China, por otro lado, anunció que los países industrializados deben «tomar la iniciativa» en la transición energética y ofrecer financiación a las naciones en desarrollo «sin demora».