Panorama económico de Neuquén, Río Negro y Chubut en seis meses
Tras la recuperación post pandemia, la economía argentina ha vuelto a entrar en una fase de contracción en el primer semestre de 2023, con perspectivas a la baja para todo el año. ¿Qué ha sucedido en estas circunstancias en las tres provincias que examinaremos?
Según el informe del IERAL, Neuquén ha tenido un desempeño muy superior al del país en su conjunto, claramente influenciado por el efecto precio del petróleo de Vaca Muerta. Con la excepción del crédito, todos los motores estaban empujando al país hacia arriba: fiscal, externo (mayores exportaciones de combustibles) e interno (el gasto público aumentó más que los ingresos a fines de 2022).
Al respecto, en medio de un fuerte crecimiento, ese año terminó con un déficit presupuestario. Aparte del petróleo, el desempeño del empleo ha mejorado en la construcción, la industria y el transporte.
Chubut, sin embargo, ha tenido un desempeño peor que el promedio nacional en los últimos años, con una caída en el primer semestre de 2023. El petróleo petrificado no se hincha en Neuquén, pero se espera que sus exportaciones disminuyan significativamente en el primer semestre de 2023.
Además de permanecer estancado, el empleo ha aumentado más que la inflación en respuesta a los impuestos, pero menos que el IVA DGI, un indicador de referencia nacional. Dos de los motores, uno interno y otro externo, han girado hacia abajo.
Datos sobre ventas comerciales
Los datos sobre ventas comerciales también lo reflejan. El caso intermedio en la región es Río Negro, cuyo desempeño es comparable al promedio nacional. Hay dos fuerzas opuestas: la fuerza agrícola (empleo, poder adquisitivo sobre las exportaciones de frutas) y la fuerza petrolera (utilizando una porción de Vaca Muerta).
La industria de la construcción, así como el turismo (aunque con menos fuerza que la media nacional), avanzan. En las exportaciones de frutas se envían más peras y menos manzanas. Había más cantidad de esta fruta, que se ha utilizado mayoritariamente para la industrialización.
Perspectivas para lo que queda de 2023: Los pronósticos apuntan a una desaceleración a nivel nacional, lo que limitaría el crecimiento de la fuerza laboral, crucial para las ventas en el mercado interno. Podría haber algún estímulo fiscal con más obra pública, típico de años electorales, beneficiando más a la industria de la construcción.
Los factores diferenciadores de la región seguirían existiendo. Vaca Muerta en Neuquén, por favor. A pesar de la eliminación de las restricciones a los productos de producción local, no se esperan muchos cambios en la industria frutícola del Alto Valle, que se ha visto gravemente afectada por la competencia (costos y clientes, como Rusia).