Paolo Rocca: “Entramos a una fase global donde la seguridad y la independencia van a liderar”
En el marco de los 25 años de la Fundación Observatorio PyME (FOP), Rocca remarcó que “América Latina tiene la oportunidad de rediseñar la cadena de valor, donde Vaca Muerta tiene la capacidad de desarrollar a la industria del gas, fortaleciendo a toda la cadena de suministros”. Del evento también participó Ezequiel Tavernelli, director ProPyme Argentina.
En el Día de la Educación Técnica, Fundación Observatorio PyME (FOP) celebró sus 25 años de trabajo en la Conferencia Bienal: “Convergencia productiva entre PyME y Grandes Empresas: transformación digital, educación técnica y eficiencia energética en cada nivel territorial”. El evento convocó al diálogo a empresarios, educadores, técnicos, funcionarios y expertos, con el objetivo de enriquecer el intercambio entre distintos sectores. El eje de la conferencia fue la necesidad de generar las condiciones que propicien una mayor convergencia de productividades entre grandes y pequeñas empresas.
La jornada comenzó con unas palabra de bienvenida de Giorgi Alliata Di Montereale, presidente de FOP, quien dijo:“Hoy celebramos 25 años ininterrumpidos de labor. Un logro que pudimos alcanzar con el compromiso y dedicación de nuestro equipo técnico sumamente calificado. Nos hemos dedicado a producir datos para la acción. Creemos que este es un instrumento extremadamente útil para la toma de decisiones de políticas públicas y privadas. Hemos pregonado una visión metodológica analítica y minuciosa con un enfoque necesario para encarar problemáticas”. Concluyó su apertura con agradecimiento final: “Quiero agradecerles a las empresas que colaboran con nuestro trabajo y que juegan un rol protagónico en la creación de empleo. La educación técnica tiene un nexo casi directo con la creación de empresas”.
Acto seguido, Fabián Calle, analista internacional, moderó el primer panel conformado por Paolo Rocca y Jorge Arguello, embajador argentino en Estados Unidos, bajo la premisa «El nuevo escenario industrial internacional», y argumentó: “No hay una política económica internacional seria sin entender la estructura del orden mundial. En el escenario de un mundo bipolar, cosa que muchos vemos, hay una rivalidad estratégica que nos va a acompañar durante décadas, quizás más que la guerra fría, con una puja económica entre EE. UU. y China. Es importante entender este contexto para implementar estrategias de desarrollo. Argentina no va a tener más margen para hacer tonterías, somos más relevantes y la mirada asertiva de Estados Unidos va a ser mucho más intensa”.
Por su parte, Arguello analizó la coyuntura internacional y remarcó: “Si hay algo que caracteriza a la actualidad internacional es la magnitud y velocidad de los cambios que estamos viviendo. Tenemos que actualizarnos permanentemente y repensar nuestras viejas certezas de cómo funciona el mundo. Es crucial desarrollar estrategias que corrijan el rumbo en unas aguas que son cada vez más inciertas para la navegación. El mundo se está volviendo más competitivo y menos cooperativo. Estados Unidos busca renovar su liderazgo mientras que China continua su ascenso obteniendo mayor reputación internacional. Ambas potencias en la región latinoamericana se están volviendo más importantes. Esto puede generar disputas en recursos escasos como es el caso del gas, del litio, del petróleo. En este contexto, Argentina debe diversificar sus exportaciones y atraer importaciones productivas, posicionándose como un nodo confiable y atractivo, multiplicando vínculos y no reemplazándolos”.
Rocca tomó la palabra, felicitó y agradeció el trabajo de FOP y dijo: “En Argentina, mantener un proyecto coherente por 25 años sin perder el rumbo es realmente un resultado extraordinario. Desde el punto de vista del Grupo Techint, el foco de atención sobre las PyMEs viene de nuestra tradición y origen. La acción de nuestra ProPyme acá y en México representa la vocación de un grupo que percibe su cadena de valor como un activo fundamental para su competitividad y crecimiento”.
Luego, analizó la actualidad geopolítica y argumentó: “Estamos frente a un cambio del equilibrio geopolítico sustancial. Pasamos de un siglo breve de Hobsbawm a Fukuyama y el fin de la historia. Se podría hablar de un siglo de globalización sin conflicto, en el cual se podría haber llegado a una confluencia de valores y sistemas de un mundo más integrado. Fue un tiempo de mucha esperanza para un cambio sustancial. Gradualmente, todo esto fue cayendo. El principal actor de este proceso es China, la cual introduce en el sistema económico mundial 250 millones de personas y logra tazas de crecimiento extraordinarias. Hay un proceso de primarización de la economía de América Latina, impulsada por un país ávido de materia prima y de conquistar un mercado de productos industriales. China asocia a su crecimiento económico un crecimiento hegemónico”.
Y continuó: “En este mundo bipolar, no hay buenos y malos. Pero hay distintas maneras de ver a la libertad, la democracia y los derechos individuales. Hay que entender los límites de las implicaciones de la cooperación, la cual se transformó en una competencia, y hoy ya es una confrontación entre dos potencias. En este contexto, la invasión de Rusia a Ucrania ocurre por un degrado progresivo del clima y de la construcción de un mundo bipolar de los años 90, y nos sorprende a todos. Es una ruptura de las reglas del juego sin antecedentes en los últimos 30 años. Nos llama la atención por su violencia. Es una invasión a una nación independiente. Sorprende sobre todo la consecuencia sobre la cadena de valor en la energía, la cual se interrumpe totalmente. Estamos esperando a ver cuáles serán las consecuencias a largo plazo. Lo mismo sucede con la cadena alimentaria. La dimensión de este conflicto muestra, en alguna medida, lo que podría ocurrir si simplemente hubiera un accidente involuntario en Taiwán o hasta una acción militar sobre la isla, lo cual hoy se considera algo sino probable, posible”.
Para finalizar, Rocca remarcó las oportunidades regionales en cuanto a la cadena de valor y aseguró: “América Latina tiene la oportunidad de rediseñar la cadena de valor. En México, las empresas crecen e invierten hasta cuatro veces más. En materia de energía, tenemos en Vaca Muerta la capacidad de desarrollar una industria del gas que fortalecería a toda la cadena de suministros de energía regional, una oportunidad extraordinaria para impulsar el trabajo de empresas pequeñas, medianas y grandes. Lo que podemos hacer allí es de extrema relevancia para la cadena de valor. La cadena de transición energética también es una oportunidad increíble en materia de litio o cobre. Estados unidos necesita rediseñar su cadena que sostiene la transición energética. Hoy, China tiene un virtual monopolio de los factores esenciales de esta cadena de valor. Las oportunidades son muchísimas y muy variadas. Estamos entrando en una nueva fase global, donde la seguridad y la independencia van a liderar. El conflicto entre Rusia y Ucrania nos indica que no nos liberamos del siglo pasado y nos explica que mantenemos reglas de juego ajenas a estos tiempos. Para nuestra región, esto impone una reflexión, un debate interno. Nadie sabe dónde vamos a estar en cinco o diez años. Lo que pasa en Ucrania nos hace entender que es difícil tener previsibilidad”.
El evento continuó luego con un panel dedicado a las “Experiencias comparadas de cooperación entre el sistema educativo y el sistema productivo”. El mismo estuvo integrado por Ezequiel Tavernelli, director ProPyme Argentina, Claudio Dondi, experto en calidad, innovación y equidad educativa de Confindustria Reggio Emilia y Gerardo Marchesini, director ejecutivo del Instituto Nacional de Educación Tecnológica (INET).
En este contexto, Tavernelli remarcó: “A través de Gen Técnico ProPymes, desde el año 2013, hemos capacitado a más de 8000 estudiantes y docentes, otorgamos más de 1400 prácticas profesionalizantes y estamos trabajando en 45 escuelas,en 45 localidades, en 5 provincias. Esta mancomunión entre escuela, gobierno y empresas chicas y grandes termina siendo fructífera porque da oportunidades, porque marca una agenda y porque acerca a personas que no tenían un destino laboral a algo mucho más sustentable como es un empleo industrial”.