Apenas inició la pandemia, y pese a regir la prohibición de despedir personal con la excusa del aislamiento, la multinacional argentina Techint intentó desprenderse de más de 1.400 empleados, lo que enfrentó a su CEO Paolo Rocca, con el propio presidente de la Nación Alberto Fernández. Los cruces entre el empresario y el gobierno se reeditaron cuando la firma cobró los ATP, la ayuda estatal para pagar salarios, incluyendo a personal jerárquicos y puestos de gerencia. Estas situaciones, sumadas a los vaivenes del hasta ahora poco avanzado pacto social, terminó de complicar una relación que nació tensa. Esta semana, el grupo vuelve a ser noticia por otro intento de ajustar los salarios de sus empleados: según ya informó a los trabajadores de la subsidiaria Tenaris Siat su intención de pagar hasta fin de mes el 50 por ciento de los salarios.

La rebaja comenzaría a regir en agosto, y es rechazada por el gremio metalúrgico y el personal, que esta semana realiza asambleas para definir las acciones si la empresa mantiene esta intención.

Tenaris Siat pertenece al grupo empresarial de la familia Rocca, y produce tubos de acero con costura para el sector del petróleo y el gas, y los últimos años tuvo un auge por el desarrollo de Vaca Muerta. Sin embargo, desde que comenzó la pandemia y el aislamiento social intentó rebajar los salarios de sus empleados.

En abril le quitó un plus de productividad a los empleados, lo que significó un ajuste en los ingresos de bolsillo. Ahora, quiere pagar la mitad de los sueldos por todo lo que queda del año. “La propuesta de la empresa hasta fin de año para las plantas Tenaris es el pago del 50 por ciento de los salarios”, confirmó José Villa, delegado de la planta de Valentín Alsina, en el distrito bonaerense de Lanús.

En diálogo con Gestión Sindical, el trabajador aseguró que luego de conocida esta idea “fue rechazada en general por una asamblea, u ahora se comenzó a negociar alternativas, siempre dejando en claro que no se aceptan rebajas de este calibre”. En principio, se habló de una rebaja salarial en agosto, pero luego de extendió por el resto de los meses.

Según contó Villa, la firma comenzó a trabajar entre abril y mayo, cuando se flexibilizó la cuarentena más dura que comenzó el 20 de marzo. “Estamos con poco trabajo en este momento, pero siempre estuvimos produciendo”, aclaró el delegado. Lo que sucedió esta semana, es que ante la propuesta de la rebaja salarial los empleados comenzaron a realizar asambleas y encuentros informativos.

“Desde ayer (por el martes) estamos en asamblea permanente por esta situación de la rebaja salarial, los compañeros se plantaron en el reclamo de un acuerdo que sea superador al planteado por la empresa”, dijo Villa. Desde el inicio de la pandemia, los empleados de Tenaris vienen sufriendo una reducción salarial, ya que Techint decidió dejar de pagar un plus por productividad que se abona desde hace décadas. Esto generó que los empleados cobraran un 85 por ciento del salario. “En realidad la rebaja es de un 20 por ciento real, por este ítem que nos quietaron. Esta semana es clave para saber cómo seguirá la cuestión, porque el acuerdo vigente vence el viernes”, adelantó Villa.

La nueva embestida de Techint se da luego de que la propia firma aceptara el pago de los ATP por parte del gobierno. Esta ayuda salarial del 50 por ciento no impidió que se intentara despedir a unos 1.500 trabajadores, algo que fue frenado por la conciliación obligatoria dictada en la provincia de Buenos Aires.

Luego que se criticara la actitud de la empresa de Rocca por aceptar la ayuda del Estado e intentar bajar sueldos, la empresa decidió devolver esos fondos. Además, el gobierno había definido que si las firmas recibían la ayuda, no podían realizar una serie de maniobras, como repartir ganancias entre accionistas, comprar dólares o girar recursos al exterior.

En 2018, la multinacional de la familia Rocca había cerrado con un balance económico de 1.662 millones de dólares, lo cual representó un incremento del 62 por ciento con respecto al año anterior. Durante el último ejercicio de ingreso, el grupo empresarial informó un aumento de 2.100 millones de dólares, lo que significó un récord para la historia de la empresa.

En lo personal, se calcula que su propietario registra una fortuna de 8.000 millones de dólares. Tenaris es una de las fábricas pertenecientes a Techint, encargadas de la fabricación de tubos, que se utilizan en el rubro petrolero.

La relación del grupo ítalo-argentino y el gobierno del Frente de Todos siempre osciló entre la tensión y el acuerdo. Como integrante de AEA “Asociación de Empresarios Argentinos”, llevó adelante varios encuentros en el último tiempo con dirigentes de la CGT, para intentar reeditar una idea inicial de Alberto Fernández: el pacto social. La necesidad de ese acuerdo entre gremios y empresarios se fue limitando por las diferencias, y la pandemia cambió el escenario. Pero los últimos encuentros anuncian una nueva sintonía. Pero las acusaciones de “miserable” que hizo el presidente sobre Rocca sin mencionarlo, es una brecha que todavía no se salva. Desde la Casa Rosada rechazan las políticas laborales del grupo, pero saben que sus más de 50 mil puestos de trabajo son necesarios para la etapa que se viene.