“Paraguay tiene que considerar el valor estratégico que tiene el agua en Itaipú”
Enzo Sauma, especialista chileno, afirmó que Paraguay debe considerar el costo de oportunidad del agua al negociar Itaipú. Apuntó que es un mito que el petróleo sea más barato que las energías renovables.
–Con base en la experiencia de Chile, es natural que cada gobierno que asuma tenga su agenda energética. Pero lo importante es que sea de largo plazo, a 20 años. Es necesario que la política energética se haga independientemente al gobierno de turno, que no venga otra administración y cambie todo, que vea que todo está mal. Las personas, los agentes, los inversionistas necesitan señales de certidumbre, cuál es la línea. Por ejemplo, si alguien quiere invertir en energías renovables, la inversión va a durar 30 años. No puede estar dependiendo del gobierno de turno, si le van a dar o no los incentivos.
–¿Y cómo se puede lograr ese consenso, sobre todo cuando hay muchas dudas sobre las energías renovables y se sigue apostando al petróleo?
–Hay dos elementos claves. En primer lugar necesitamos a todos los agentes sentados en la mesa, que cuando se discuta la política energética haya participación de la ciudadanía, de las empresas, de las maquiladoras, de las firmas forestales, de la industria y del Gobierno. Que todas las partes den sus puntos de vista es clave para que tenga validez la política. En segundo lugar, tiene que haber un marco regulatorio que facilite lograr energía económica y limpia para todo el país. Cuando uno dice que el petróleo es más barato que las energías renovables, eso tiene un mito detrás. El petróleo solo es más barato si se mantiene toda la estructura de precios que existe hoy en Paraguay, pero eso no tiene por qué ser así.
–¿Cómo se cambia eso?
–Si la energía eléctrica se cobra de acuerdo a los costos de producción, que son marginales, muy baratos y no hay un cargo demasiado alto para la distribución, entonces la energía renovable podría ser más barata que el petróleo. Con la estructura que se tiene hoy en día, el privado tiene que hacer toda la inversión. Pero hay formas de financiar esas inversiones, depende de las estructuras e incentivos que se den. La política tiene que definir hacia dónde queremos ir, para después bajar eso a programas de gobierno, reglamentos y leyes.
–¿Qué se sabe en el extranjero de Paraguay en materia energética?
–Se sabe que tiene un gran potencial hidroeléctrico y, por lo tanto, uno piensa que es el candidato ideal para que electrifique todo. Tiene tanta electricidad y llama la atención que solo un 18% de todo su consumo energético sea eléctrico. No sé la explicación, pero uno puede intuir que no existe la infraestructura para distribuir al consumidor de forma robusta toda esa energía que está disponible en la generación. Se tiene que ver cómo fortalecer el sector distribución, cómo dar los incentivos adecuados para que se fortalezcan las inversiones en distribución.
–¿Cómo podemos aprovechar nuestros excedentes, teniendo en cuenta que se irán agotando en el 2030?
–A nivel mundial se ha visto que la hidroelectricidad es un excelente complemento de las energías renovables intermitentes, como son la solar y eólica. Si uno quiere electrificar más el sector transporte, por ejemplo, debiera tratar de usar esa complementariedad entre esas fuentes. No simplemente usar toda la energía hidráulica, sino que se debe fomentar la solar y eólica. Entonces, en los momentos en los que no haya sol y viento, complementar con hidráulica. Es sumamente conveniente.
–¿Cuál es la experiencia de Chile en energías renovables?
–Al igual que acá, nosotros no tenemos producción de petróleo, gas ni carbón. Importamos todos los combustibles fósiles y solo tenemos energías renovables. Por efectos del cambio climático, en Chile cada vez tenemos menos agua. Hace 15 años, los factores de planta, que significa cuántas horas al año funcionaban las hidráulicas era del 65% del año y hoy están alrededor del 35%. Cada vez los años son más secos y eso genera un problema. Como las energía solar y eólica ya no podemos reemplazar con hidráulica, lo hacemos con centrales térmicas, pero los procesos de descarbonización hace que uno no quiera tener esas térmicas. Ahí uno ya mira otras tecnologías, como almacenamiento de baterías, pero estamos todavía tocando con temas de costo.
–Considerando ese valor del agua, ¿qué debería tener en cuenta Paraguay al negociar con Brasil por Itaipú?
–Lo importante es reconocer primero que el agua tiene un valor estratégico cuando se decide cuánto se va a producir o cómo se va a operar una central hidroeléctrica. El agua, en estricto rigor, tiene valor unitario cero, igual que el sol. Es gratis una vez que se hace la inversión, pero a diferencia del sol que es muy abundante, el agua sí tiene un valor estratégico. Si yo uso agua hoy, no tengo agua para mañana. La forma como normalmente se calcula ese valor estratégico en el sector energético se llama costo de oportunidad. Es decir, si no tuviera el agua ¿cuánto me costaría producir esa misma unidad de energía? Y eso depende de cada sistema. Si no tuviera agua Paraguay, ¿cuánto le costaría producir ese mismo megavatio hora (MWh)?
–¿Qué otros factores se tienen en cuenta?
–El valor estratégico del agua en Paraguay tendrá que ver también con qué inversiones estratégicas se van a hacer. Si el día de mañana se acaba el agua de Itaipú, con qué se reemplazaría esa energía. Si se reemplaza con térmica o solar, ese es tu costo de oportunidad del agua. Y las inversiones se definen en la política energética.
Se sabe que Paraguay tiene un gran potencial hidroeléctrico, es el candidato ideal para que electrifique todo. Llama la atención que solo un 18% de todo su consumo sea eléctrico.
Cuando uno dice que el petróleo es más barato que las energías renovables, tiene un mito detrás. El petróleo es más barato solo si se mantiene toda la estructura de precios que existe hoy.
Ficha personal
Nombre: Enzo Enrique Sauma Santis.
Nacionalidad: Chilena
Formación: Ingeniero Civil Industrial (Universidad Católica de Chile), Magíster en Ciencias de la Ingeniería (Universidad Católica de Chile), Ph.D. en Ingeniería Industrial e Investigación de Operaciones, Universidad de California.
Trabajo: Docente en Ingeniería, Universidad Católica de Chile.