Pedido a Milei: energéticas quieren más desregulación para avanzar con sus planes
Las principales compañías del Oil & Gas y las renovables coincidieron en un reclamo al Gobierno de acelerar la desregulación del sector para agilizar inversiones claves que permitan un salto exportador.
La industria energética se asume como uno de los grandes segmentos que puede transformarse en factor de desarrollo para la Argentina, pero demanda al Gobierno la creación de un marco de negocios adecuado basado en una desregulación y en un fortalecimiento de la seguridad jurídica para atraer las inversiones millonarias necesarias.
En medio de una incipiente tensión con la administración de Javier Milei, los líderes de las principales compañías del Oil & Gas y las renovables se encontraron en el VI Fórum Nacional de Energía, que organizó LIDE Argentina en el Alvear Palace Hotel de la Ciudad de Buenos Aires, con una premisa acorde a los nuevos tiempos: Libertad & Seguridad Energética.
El encuentro, articulado por Rodolfo de Felipe, presidente de LIDE, tuvo asistentes de primer nivel. «La industria energética requiere actuar con urgencia sobre temas tácticos y estratégicos vinculados al sistema eléctrico y la producción de Oil & Gas», expresó.
En el salón habilitado para apenas 200 personas, se encontraron Horacio Marín , presidente y CEO de YPF; Alejandro Bulgheroni, presidente de Pan American Energy;Ricardo Markous, CEO de Tecpetrol; y Martín Genesio, presidente y CEO de AES Argentina, entre muchos ejecutivos de la larga cadena de valor.
Los empresarios, como suelen hacerlo en público, volvieron a expresarse casi al unísono en favor de las líneas generales que pretende dar el Gobierno nacional al sector, en marcada diferencia con lo que vienen viviendo en los últimos 20 años, pero también coincidieron en la oportunidad de acelerar las reformas y un especial hincapié en respetar las reglas de juego.
Entre las exposiciones esperadas de los titulares de la mayor empresa energética de la Argentina y del principal grupo privado del país, los líderes de la industria remarcaron la oportunidad histórica de la Argentina de desarrollar sus recursos y a partir de ellos apuntalar al desafiante desarrollo y lucha contra la pobreza.
Futuro energético
Markous puso en cifras esa expectativa al repasar que la proyección del sector es que el país puede duplicar la producción de gas y petróleo para 2030, de lo cual 80% provendrá de Vaca Muerta, lo que permitirá un superávit de la balanza energética con exportaciones por u$s 30.000 millones apalancado en las ventas de petróleo y Gas Natural Licuado (GNL).
«Pero para que el ‘ramp up’ sea más rápido hace falta más que reinvertir lo que hacemos hasta hoy las empresas. Hay que traer capitales de afuera y para eso hay que superar algunas barreras y dar contexto adecuado y que todas las empresas nos pongamos de acuerdo», dijo el líder de Tecpetrol en referencia a proyectos clave como el Oleoducto Vaca Muerta Sur o la mega factoría de GNL cuyo proyecto encabeza YPF con la malaya Petronas.
Momentos antes, Marin y Bulgheroni ya habían dejado a la audiencia sus definiciones sobre la importancia de que el Congreso nacional avance con la sanción de la Ley de Bases que incluye la creación de un Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones (RIGI), el cual se presenta como la llave de los principales proyectos en el portfolio del sector.
En esa línea, Martínez Álvarez, el titular de otra de las empresas del Grupo Techint, enfatizó que «la ley es absolutamente vital para el desarrollo del sector junto al arreglo de la desvencijada macro, clave para aprovechar toda la potencia de estos desarrollos».
En esa estrategia, el presidente de Tenaris planteó «priorizar de manera absoluta el desarrollo de petróleo y su ventana de oportunidad concreta de corta en el tiempo. Con esa rentabilidad generar los recursos e infraestructura para la segunda etapa del gas y juntas a financiar la tercera etapa de las renovables y la economía del hidrogeno aún mayores de inversión de capital y muchísimas más bajas rentabilidad».
En el cierre del encuentro, cuando ya estaban confirmadas las ausencias de la canciller Diana Mondino y del Secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo; el CEO de la estadounidense AES redobló el planteo de la industria, en particular con el cumplimiento de los contratos en nombre de la seguridad jurídica que es particularmente observada desde el exterior.
Llamadas externas
«Esta semana tuvimos una resolución mediante la cual se decidió no respetar ciertos contratos y proponer un pago de Cammesa tomando una quita. Esa es una señal muy mala y lo digo desde el lugar de una de las pocas multinacionales grandes del sector», cuestionó Genesio al revelar consultas del Fondo Monetario Internacional, del Departamento de Estado y de Energía de los Estados Unidos, y de la Embajada de aquel país en Buenos Aires.
«La pregunta era solo una: ¿Por qué el gobierno hizo esto?» refirió el ejecutivo sobre las consultas recibidas a lo que sintetizó que «cuando un contrato no se respeta el impacto es gigantesco, sobre todo cuando el mercado solo se puede desarrollar con inversiones grandes de empresas para las cuales romper un contrato es un hecho grave».
Por si hacía falta mayor contundencia en el planteo, Fernando Bonnet, CEO de Central Puerto, el principal grupo generador de electricidad del país, afirmó que el planteo del Gobierno «No es una buena señal, más allá de que es una propuesta, pero implica una quita y donde no se analiza ni se distinguen las distintas situaciones de las compañías. Aunque hay soluciones a buscar tratando de entender la situación del Gobierno».
Bonnet también marcó el rumbo tarifario esperado por el sector. «Los costos de la energía van a ir bajando, pero la demanda se tiene que transparentar, cubrir y conocer y en los últimos años estaba totalmente disociado. Hay que seguir con (la reducción de subsidios en los segmentos) N2 y N3, porque no hay mercado sustentable si la demanda no puede cubrir los costos reales».
Inversiones en espera
La necesidad de acelerar marcos regulatorios específicos también fue eje de la presentación de Bernardo Andrews, CEO de Genneia, la principal generadora de energía renovables del país, quien señaló que en el Mercado a Término de Energías Renovables (Mater) hay compromisos de inversión de 3800 Mw» según se recogió en el último llamado de Cammesa para asignar prioridad de despacho
«Hay en espera inversiones de u$s 5000 millones mínimos en promedio de tecnologías eólica y solar», aseguró el directivo al entender que «la clave es no ignorar el enorme esfuerzo de los privados y diseñar los marcos regulatorios que puedan hacer eso financiable, sino es solamente voluntarismo».
Finalmente, el debate se extendió también al segmento del transporte del gas natural con la presencia de Daniel Ridelener, CEO de TGN, que se refirió a los «cuellos de botella regulatorios» en un contexto de cambio de paradigma de esquema administrado por el Estado a otro desregulado.
«El Gobierno actual cambió esa definición, pero son varios los temas para desarrollar infraestructura nueva y necesitamos recrear cadenas de contratos, con una regulación sólida que permita y confiar en que van a ser sustentables de largo plazo», expresó el directivo que gestiona la mitad de la red de transporte gasífero del país.
En ese sentido, defendió a necesidad de actualiza la base Ley de Gas, la Ley de Hidrocarburos y la nueva Ley de Bases con la introducción del RIGI como algo fundamental «porque somos pocos competitivos con nuestras condiciones impositivas y de financiamiento y necesitamos ese régimen para poder ser competitivos a nivel mundial».
Fuente: Cronista