El Gobernador Alfredo Cornejo, acompañado por la vicegobernadora, Hebe Casado, y la ministra de Energía y Ambiente, Jimena Latorre, recorrió proyectos estratégicos, entre ellos un descargadero de crudo en Malargüe, que optimiza la logística y fortalece la producción en el Sur mendocino.

La visita, liderada por el Gobernador Alfredo Cornejo, junto a la vicegobernadora Hebe Casado y la ministra Jimena Latorre, destacó las recientes adjudicaciones de tres áreas hidrocarburíferas y las obras en infraestructura que consolidan el desarrollo energético mendocino.

Durante el recorrido, Latorre subrayó la importancia de estas iniciativas para el futuro de la provincia: “La actividad hidrocarburífera permite soñar con un futuro prometedor para la provincia. Y no solo es un sueño, ya es una realidad. Esta obra que venimos a visitar hoy comenzó hace algunos meses, cuando se iniciaron las tareas en el área. Aquí, en esta explanada y con la infraestructura que tenemos detrás, no solo se puede almacenar petróleo sino también inyectarlo y bombearlo directamente al oleoducto que conecta Puesto Hernández con la refinería de Luján de Cuyo”, expresó la ministra.

La empresa Hattrick Energy, actual concesionaria del área Lindero de Piedra junto con EMESA, ha sido adjudicataria de tres nuevas áreas petroleras: dos permisos exploratorios (CN V y Malargüe) y una concesión de explotación (Loma el Divisadero). Por otro lado, gracias al aumento de la producción, hizo un nuevo descargadero de crudo, fundamental para las empresas que operan en el Sur.

Mendoza sigue trabajando por la producción hidrocarburífera y gracias a las políticas de aliento a la inversión y a su modelo de licitación continua adjudicó tres nuevas áreas: CN V y Malargue para exploración; y Loma del Divisadero para explotación.

La adjudicación de CN V y Malargüe marca el regreso de las áreas exploratorias a la agenda petrolera de Mendoza, tras siete años desde la última licitación exploratoria. Estas áreas representan una apuesta al futuro, con oportunidades para descubrir nuevos recursos y certificar reservas aún no comprobadas. Además, el área Loma el Divisadero refuerza la explotación activa en la región, con posibilidades de generar producción inmediata.

Resultados destacados en Lindero de Piedra

La adjudicataria es Hattrick Energy, que junto con la Empresa Mendocina de Energía tiene la concesión de explotación de Lindero de Piedra, que gracias a la planificación de la UTE, las inversiones en exploración, en instalaciones de superficie y perforaciones de nuevos pozos; hoy opera superando todas las expectativas. “El área produce crudo pesado, un tipo de crudo que hoy es muy demandado por las refinerías para ´cortar´ el petróleo liviano que proviene de diferentes áreas de la cuenca neuquina”, explicó el director de Hidrocarburos del Ministerio de Energía y Ambiente, Lucas Erio.

“Lindero de Piedra es una concesión de explotación que deviene de un permiso exploratorio. No tenía reservas certificadas y gracias a la exploración de la UTE, se han certificado reservas y desde hace 5 años viene con aumento de producción sostenido. Comenzó en el año 2019 a registrar los primeros valores de producción, los cuales estaban en el orden de los de los 20m3/día. Actualmente esos valores superan los 60m3/día”, explicó Erio, quien además agregó que durante 2024 la campaña de perforación incluye 5 pozos nuevos.

Descargadero de crudo: infraestructura clave para el sur mendocino

Latorre también destacó el impacto positivo de estas obras en pequeños operadores del sector, que ahora cuentan con mayores oportunidades para inyectar y comercializar su producción. “Esta infraestructura es clave para la producción de pequeños operadores. Aunque sean pequeños en términos relativos, si los comparamos con grandes actores como YPF, estas inversiones son fundamentales para diversificar y fortalecer nuestra producción”, señaló.

Además, la ministra resaltó que Mendoza ha recuperado una producción de nueve mil metros cúbicos en los últimos seis meses, un logro que estabiliza la curva productiva de la provincia.

“Gracias al aumento de la producción, la UTE construyó un descargadero de crudo en Malargüe” señaló Erio. Esta instalación permite la descarga y almacenamiento del petróleo a tanques térmicos conectados directamente al oleoducto Puesto Hernández que se dirige hacia la Refinería de Luján de Cuyo. “La inyección directa de crudo al oleoducto es fundamental para la comercialización a gran escala y el desarrollo del sector en el sur mendocino. Es la solución más eficiente para viabilizar la logística de esta producción” destacó Erio.

Sobre Hattrick y EMESA

Emesa (Empresa Mendocina de Energía Sociedad Anónima), es una compañía estatal dedicada a gestionar y promover proyectos energéticos. Su objetivo es fomentar el desarrollo y aprovechamiento de los recursos energéticos de la provincia, incluyendo fuentes tradicionales y renovables. De esta forma, es un motor de inversión y crecimiento económico al impulsar proyectos que contribuyen a la diversificación de la matriz energética y al fortalecimiento de la infraestructura eléctrica y de hidrocarburos en Mendoza.

Junto con Hattrick Energy, declaró la comercialidad de la totalidad de Lindero de Piedra en 2023 y solicitó su explotación por 25 años, lo que sumó un nuevo bloque petrolero para Mendoza: el área 43. La inversión total alcanzará los USD 27.300.000, que incluyen la perforación de 27 nuevos pozos y la contratación de mano de obra local. Hattrick Energy se dedica a la exploración y producción de hidrocarburos en cuencas de alto potencial, identificando oportunidades para reactivar activos y capitalizarlos mediante tecnología probada en Norteamérica.

Su enfoque combina sostenibilidad y crecimiento orgánico, priorizando métricas clave como el flujo de fondos y el reciclaje de reservas para generar valor. La empresa asigna capital con un criterio claro y enfocado, mitigando riesgos tanto en el subsuelo como en la superficie.

Además, aplica tecnología avanzada en cuencas con alto rendimiento, logrando maximizar resultados. Desde su creación, Hattrick Energy ha trabajado en Argentina adaptando su experiencia técnica para proteger el medio ambiente y respetar el patrimonio arqueológico y cultural de cada área donde opera.