Petroleras frenan equipos de perforación y licencian personal en yacimientos
Por la crisis sanitaria desatada por el coronavirus, las principales petroleras reducirían al mínimo su nivel de actividad en sus yacimientos. Desafectarán equipos de perforación y WO a medida que completen trabajos asignadas.
Las empresas productoras de hidrocarburos empezaron a delinear sus planes de contingencia frente al coronavirus sobre una premisa: cada equipo torre que finalice el trabajo asignado se parará como mínimo hasta fines de marzo. Sólo continuarían en operación los equipos críticos, en especial pulling necesarios para mantener la producción. Los equipos de perforación y los workover que están activos se irán desafectando a medida que completen los trabajos asignados.
Las petroleras terminarán de definir en estas horas el alcance de la estrategia. Antes quieren conocer las medidas que anunciará el gobierno en el transcurso del día de hoy. Pero según coincidieron cuatro altos ejecutivos consultados por EconoJournal el freno de la actividad es una decisión tomada.
“No podemos seguir operando normalmente en las locaciones. Lo más probable es que a medida que los equipos de drilling y workover finalicen los trabajos de perforación y cementación que están realizando, frenen al menos hasta fin de marzo”, admitió el director de Upstream de una petrolera.
Las empresas descuentan que licenciarán a buena parte del personal empleado en los yacimientos. Los empleados de escritorio, gerenciales y administrativos emplazados en Buenos Aires y en sedes regionales comenzarán a trabajar desde hoy de forma remota bajo el formato de home office. Eso definieron, por ejemplo, grandes petroleras como YPF, Pan American Energy (PAE) y Tecpetrol, brazo petrolero del grupo Techint.
Alcance de la medida
El próximo paso es definir qué cantidad de operarios de los campos petroleros serán licenciados. YPF, la mayor compañía del mercado, maneja una red de 20.000 empleados directos y otros 50.000 indirectos y contratistas. “Cada unidad de negocio elaboró un plan para trabajar con la menor cantidad de gente posible. En los hechos, todo aquel que pueda realizar su trabajo de forma remota debe hacerlo. Se están definiendo planes de continuidad laboral en función de distintos escenarios y niveles de criticidad”, explicaron allegados a la petrolera. “Más compleja es la situación de las refinerías, que no pueden parar de un día para otro los procesos industriales de ese tipo de plantas”, agregaron.
En total, la industria petrolera involucra a unas 130.000 personas de forma directa e indirecta. En el upstream (exploración y producción) serán unos 80.000 operarios a nivel nacional. Es probable que, si el gobierno endurece sus políticas sanitarias para intentar ralentizar el avance del Covid-19, buena parte de ese personal sea licenciado por algunas semanas.
El gobierno monitoreará cómo actúan las petroleras. El viernes la Secretaría de Energía concentró sus esfuerzos en coordinar con las empresas de servicios regulados (eléctricas y gasíferas) un plan de respuesta para los usuarios residenciales.
Fuente: Econojournal.