La Justicia revocó la medida cautelar que impedía la exploración petrolera offshore en la Cuenca Argentina Norte (CAN).

La Cámara Federal de Apelaciones de Mar del Plata revocó la medida cautelar que impedía la exploración petrolera offshore en la Cuenca Argentina Norte (CAN), que podría hacer crecer el PIB en 2% y generar exportaciones por US$ 447.076 millones, según un informe de Ecolatina.

Ahora, la compañía noruega Equinor, como operadora de algunas de las áreas concesionadas por el Estado Nacional en el Mar Argentino para su exploración, podrá continuar con las actividades de prospección sísmica de los bloques.

Se trata de la primera vez que se efectúa una exploración en aguas de 1.500 metros de profundidad.
«La producción de Oil & Gas convencional muestra un declive sostenido de 20 años, solo revertido por el crecimiento de Vaca Muerta, que es una excelente noticia pero el costo del no convencional es superior al convencional», señaló el economista Alejandro Einstoss.

«La exploración offshore es una enorme oportunidad para recuperar yacimientos de bajo costo y volver a transformar al sector en exportador neto y revertir la balanza comercial energética», agregó.

El proyecto en la CAN va a ser llevado adelante por el consorcio de empresas que conforman Equinor, YPF y Shell, en 3 de los 18 bloques adjudicados en 2019 con compromisos de inversión iniciales por casi US$ 800 millones.

Además, en caso de existir descubrimientos offshore, las inversiones en upstream (actividades de exploración y producción) podrían aumentar exponencialmente, según un informe de Ecolatina:

1 descubrimiento: US$ 5.305 millones
5 descubrimientos: US$ 26.525 millones
10 descubrimientos: US$ 53.050 millones

«La posición de los geólogos respecto de la posibilidad que haya hidrocarburos bajo el lecho marino en esas latitudes está dividida. Los que aseguran que hay se basan en la teoría de la escisión de los continentes y suponen que, al igual que en Brasil, en Argentina puede haber cuencas sedimentarias que en algún momento compartieron con la costa occidental africana», señaló el ex secretario de Energía, Emilio Apud.

En este sentido, a comienzos de año, se conocieron dos importantes descubrimientos offshore de un volumen total estimado en 3.000 millones de barriles de petróleo en Namibia, en la costa de África del Sur. El hecho de que hace 121 millones de años, cuando se formaron estas acumulaciones, América del Sur estara mucho más cerca del continente africano hace pensar a los geólogos que a 300 km de Mar del Plata existen yacimientos similares.

De hecho, Venus, uno de los pozos perforados, está a no más de 200 km de las áreas que YPF está explorando actualmente en la CAN.

«En caso de comprobarse la existencia de grandes yacimientos offshore, los beneficios para el país pueden ser de gran envergadura siempre que sean económicamente extraíbles y se obtengan antes que concluya el período de transición energética que estimo será en aproximadamente 40 años», afirmó Apud.

«En base a las estimaciones preliminares el aporte del offshore a la economía del país asumiendo 5 descubrimientos comercialmente aptos con producción de unos 400.000 barriles diarios, cerca del 70% de la producción actual, el PIB crecería en el orden del 2% anual, la balanza comercial se incrementaría más del 15% y el gobierno participaría de la renta vía regalías e impuestos en unos US$ 4.000 millones al año», detalló.

En cuanto al empleo se estima que generará, para este nivel de descubrimientos, unos 120.000 puestos de trabajo entre directo indirecto e inducido.

La industria hidrocarburífera offshore precisa del desarrollo de una amplia cadena de valor de proveedores: embarcaciones de alta mar, aviación, construcción y mantenimiento de plataformas, buceo, ingeniería, hotelería, entre otros.

«Actualmente el offshore tiene una gran importancia en la economía: participa en 0,2% del PIB y del valor bruto de la producción. Al sumar los efectos indirectos e inducidos, esa participación pasa a ser del 0,6%», señaló Ecolatina.

«Los sectores más beneficiados en cuanto al crecimiento serían: Transporte marítimo/aéreo (0,5%-3,7%), electricidad, gas, agua (0,2%-2%), hoteles y restaurantes (0,2%-1,5%)», agregó.

«Claro que además de lograr esos niveles de producción, que son valores no optimistas, las empresas deberán desarrollar mercados que en la transición serán sumamente competitivos y con rentabilidad decreciente a medida que se acerque el net zero o el fin de la extendida era del petróleo, al menos como combustible», agregó el ex funcionario.

En la misma línea, Einstoss considera necesario aprovechar la ventana de oportunidad del petróleo y gas, una actividad que genera rentas, y divisas para una economía que requiere de ambas.

Al respecto, Ecolatina estimó la cantidad de exportaciones totales que se podrían generar según la cantidad de descubrimientos:

1 descubrimiento: US$ 44.708 millones (11% del PIB 2020)
5 descubrimientos: US$ 223.428 millones (57% del PIB 2020)
10 descubrimientos: US$ 447.076 millones (1,15 veces el PIB 2020)

Asimismo, en el peor de los casos, la participación del Gobierno vía regalías sería de US$ 700 millones (53% de las regalías petroleras actuales) y en el mejor, de US$ 8.300 millones (6,4 veces las regalías petroleras actuales).

Fuente: El Economista