Rusia: Luego de las sanciones de Occidente está en la búsqueda de nuevos compradores para su crudo
«No tengo ninguna duda de que habrá compradores para nuestros productos (petroleros)», dijo Serguei Riabkov, viceministro ruso de Relaciones Exteriores, citado por las agencias de prensa rusas.
La Unión Europea (UE), los países del G7 y Australia anunciaron el pasado viernes, la imposición de un tope de 60 dólares para el barril de petróleo ruso, que rige desde el miércoles, una iniciativa inédita que apunta a erosionar una fuente clave para Moscú para financiar su ofensiva en Ucrania.
Esta medida, según Riabkov «fragmentará» la economía mundial «en numerosos ámbitos». Ayer, la embajada de Rusia en Estados Unidos tildó de «peligroso e ilegítimo» el tope y confió en que «el petróleo ruso seguirá teniendo demanda» en ese país.
«Estamos asistiendo a una remodelación de los principios básicos del libre mercado. Este tipo de medidas se traducirá inevitablemente en un aumento de la incertidumbre y en la imposición de costos más elevados para los consumidores de materias primas», afirmó en un comunicado subido a sus redes.
El mecanismo prevé que sí el precio del hidrocarburo ruso supera los 60 dólares, las empresas radicadas en países de la UE, del G7 o en Australia tendrán prohibido ofrecer sus servicios de transporte marítimo, que incluyen el comercio, el flete, seguros, armadores, etc.
Los países del G7 proporcionan servicios de seguros al 90% de los cargamentos mundiales, y la UE es un actor destacado en el flete marítimo.
Por su parte, el viceprimer ministro ruso encargado de Energía, Alexander Novak, que ya advirtió que Rusia dejaría de suministrar petróleo a los países que apliquen la iniciativa de los occidentales, repitió hoy que esto «conducirá a un aumento todavía más importante de los precios» en los mercados mundiales.
Según Novak, el tope instaurado «no es una tragedia» para Rusia, consignó la agencia de noticias AFP.