Consultores proyectan que la reactivación general impacte en el consumo de combustibles. Además ven un aumento de demanda para nuevos trabajadores en los establecimientos de carga de combustibles.

La consultora Randstad, dio a conocer un análisis con los sectores que estarán más activos respecto a la generación de empleo para este año.

Aquí se destaca la encuesta que con una economía que finalmente tiende a recuperar niveles de actividad pre-pandémicos, el 2022 se presenta con mejores perspectivas en relación a la generación de puestos laborales, especialmente para algunos sectores, como es el caso del rubro energético, que será una vertiente de oportunidades para el comercio de combustibles, el cual demostró una readaptación constante a las necesidades del mercado, de las nuevas tecnologías y de las demandas de los consumidores.

Germán Ruíz, director de Outsourcing de Randstad Argentina dijo: “Para el año entrante están previstas distintas inversiones que impulsarán la actividad en diversos sectores de la cadena de valor de la producción y distribución de energías, que permitirán proyectar un crecimiento sostenido de la demanda de nuevos puestos de trabajo a nivel nacional en toda esta industria, tan estratégica para el crecimiento del país”.

“Esperamos que todo esto influya directamente en la reactivación general y, en particular, impacte en el consumo de combustibles, de modo que las perspectivas de la demanda laboral de las Estaciones de Servicio son positivas, acompañando la tendencia de toda la cadena de extracción, producción, distribución y expendio de productos finales ligadas al sector”, afirmó Ruiz.

El ejecutivo de  Randstad Argentina  asegura que las compañías solicitan día a día profesionales calificados para cubrir diversas posiciones en los centros de distribución y almacenamiento y generan nuevos puestos de trabajo en áreas vinculadas a la clasificación y armado de pedidos.

La visión de los especialistas en recursos humanos, coincide en que la crisis sanitaria ha sido un gran acelerador del crecimiento exponencial de la logística y distribución, en gran medida porque la mayoría de las organizaciones debieron adaptar su negocio a los nuevos hábitos de consumo.