Vaca Muerta sumó ocho concesiones en 3 años y fueron todas de petróleo
Los nuevos compromisos de inversión de las operadoras marcan hacia dónde crecerá la formación. Reafirman el interés en el shale local, a mediano y largo plazo.
La expansión de Vaca Muerta no solo debe medirse en producción y actividad, sino también en los nuevos compromisos de inversión que asumen las operadoras para desarrollar más áreas de formación. Desde el inicio de la pandemia hasta ahora, Neuquén otorgó ocho concesiones de explotación no convencional (Cench) y todas con un factor común: el shale oil.
Desde 2020 la provincia dio luz verde a siete operadoras para comenzar a desarrollar ocho nuevos bloques en la formación. Se trata de ExxonMobil, Pan American Energy (PAE), Phoenix Global Resources (PGR), YPF, Chevron, Pluspetrol por dos y Tecpetrol.
Y los bloques en cuestión son Los Toldos II Oeste, Aguada de Cánepa, Mata Mora Norte, Bajo del Toro Norte, El Trapial, Puesto Silva y Loma Jarillosa Este (Pluspetrol) y, por último, la más reciente: Puesto Parada.
Los datos se desprenden del ministerio de Energía de Neuquén y de una recopilación que hizo Energía On. Es destacable que la mayoría se sumó en un momento de alta incertidumbre a nivel local e internacional por la pandemia, la guerra de precios de la OPEP y también durante la invasión rusa a Ucrania.
Son 7 las operadoras que murieron nuevos compromisos de inversión a 35 en 8 bloques de la formación.
Ninguno de estos bloques hoy se encuentra en desarrollo masivo, sino más bien en etapas preliminares, aunque sí con actividad. Algunos con más avance y otros con todo listo para pegar el salto este año. Esto significa que mientras Vaca Muerta crece en producción, también lo hace en su hoja de ruta para los desarrollos futuros.
Las concesiones otorgadas permiten proyectar hacia donde avanzarán los desarrollos de la formación en el mediano plazo, o dónde estarán las apuestas fuertes de las compañías, ya que son contratos por 35 años.
Y lo que se desprende de las últimas que firmó Neuquén, coincide con los proyectos de infraestructura en marcha, y las posibilidades de crecimiento con vistas al mercado exportador. Para dar el salto exportador en el segmento del gas se requiere una planta de licuefacción de GNL, además de obras de transporte.
Con lo cual, los proyectos de gas que están en desarrollo masivo y en otras etapas preliminares tienen aún vastas reservas para explotar y abastecer no solo la demanda local, sino también parte de la de los países de la región. Por esto es que no depende exclusivamente de las operadoras que se pidan más áreas para desarrollar en el segmento.
Vale señalar que Vaca Muerta podría seguir creciendo en producción, exportaciones, inversiones, actividad e incluso reservas, sin nuevos bloques en desarrollos. Por esto es que es más que una buena señal que las empresas sigan sumando áreas a su porfolio, ya que redobla su apuesta en Vaca Muerta.
Shale oil: una tendencia marcada
Lo cierto es que desde antes del inicio de la pandemia la tendencia iba en la misma línea, los registros oficiales muestran que desde 2018 hasta hoy se otorgaron unas 20 concesiones y exclusivas de gas fueron solo dos. Hay otros dos que están sobre más ventanas de desarrollo.
Hablamos de Sierra Chata y El Mangrullo, ambas otorgadas en 2018 a Pampa Energía, ubicadas sobre las ventanas de gas seco. Específicamente, El Mangrullo se destaca por ser uno de los desarrollos de tight gas más importantes de la Cuenca Neuquina, que este año comenzará con la actividad fuerte de shale.
En 2018 también otorgó la concesión al bloque La Calera de Pluspetrol, la particularidad de esta área es que está sobre cuatro ventanas, mayormente sobre gas húmedo, condensado y petróleo volátil, lo que le permite producir tanto gas como petróleo, al mismo tiempo.
Algo parecido sucede con Los Toldos 1 Norte que se otorgó a Tecpetrol en 2019, este bloque está ubicado sobre tres ventanas: gas seco, húmedo y condensado. Una zona que ofrece una extracción equilibrada, como de wet gas con crudo asociado.
Este año Neuquén proyecta que la inversión hidrocarburífera, anclada en Vaca Muerta, alcanzará los 7000 millones de dólares. Una cifra récord para la formación y que marca -una vez más- que los récords del shale que vimos hasta ahora son apenas el punto de partida.
Fuente: Rio Negro