YPF tiene socios para ir al mundo con gas licuado
Mientras explora la salida con GNL a baja escala, la compañía nacional se prepara para la apuesta de máxima: la construcción de una planta para licuar gas, para lo que ya integra sus equipos con tres gigantes mundiales.
Fuentes de la compañía anticiparon a +e este nuevo escenario, complementario a las dos ingenierías conceptuales que ya encargó y que le demandarán una inversión de unos 9 millones de dólares.
“Hay dos de esas compañías con las que estamos con workshop e integración de equipos, en paralelo al resto de los desarrollos que llevamos adelante”, detalló una fuente de la compañía.
Agregó que aún “no está definido en qué lugar y cómo será el proyecto final” a gran escala. “Estamos trabajando con estas empresas para llegar a un punto de congruencia en algún momento de principios del año que viene”, señaló, y en función de eso establecer el rumbo a seguir.
Hace meses que parte de la agenda energética del país pasa por la posibilidad de construir una planta de licuefacción en Bahía Blanca, si bien en la principal petrolera argentina jamás descartaron otras vías, incluso complementarias a la mencionada, como la salida a través del Pacífico para el gas de Vaca Muerta.
En YPF aseguran que “a pesar de la incertidumbre” de la actual política energética y el futuro del sector en medio de la transición política nacional, “hay un interés que sigue siendo muy grande” por la oportunidad del gas licuado, una variante de la producción de Vaca Muerta que ya puso en marcha al asociarse con Excelerate Energy.
Ese acuerdo, que tiene como eje a la barcaza Tango GNL, apostada frente el predio de Compañía Mega en Bahía Blanca, ya carga gas de Neuquén para licuar en esa planta flotante. Su producción será transportada en dos buques: YPF piensa colocar seis ventas de GNL, de unos 132.000 metros cúbicos cada una, en la ventana de baja del consumo estacional en el país, entre este mes y mayo del 2020, el período en el que todas las productoras buscan mercados para sus excedentes de gas.
Argentina tiene a su favor la congruencia entre su consumo interno y países asiáticos como China y Japón. Ambas potencias requerirán de este insumo para bajar su consumo de carbón para generar energía. Y tienen sus curvas de mayor demanda en momentos en los que en el país baja el consumo en el ciclo que va de mayo a septiembre.
Fuente: LMNeuquen.